Los responsables de la central nuclear de Vandellòs 1, multados con 70 millones

El Ministerio de Industria ha calificado de grave irresponsabilidad la actuación de los responsables de la central nuclear Vandellòs 1 en el accidente ocurrido en octubre de 1989. Como consecuencia de ello, el consorcio Hifrensa, propietario de la planta nuclear, deberá pagar una multa de 70 millones de pesetas, lo que supone el 70% del total permitido legalmente. La central nuclear, una de las más antiguas de España, fue cerrada en junio de 1990.

La decisión del ministerio de Industria fue comunicada a los responsables del consorcio Hifrensa -entidad en la que participan las compañías eléctricas Fecsa; Hidroeléctrica de Cataluña (Hidruña), controlada por Hidrola; Enher, integrada en el grupo público del INI Endesa, y Electrécité de France (EDF)- la mañana de ayer viernes. El consejo de dicha sociedad deberá ahora presentar alegaciones en un periodo máximo de ocho días para que, posteriormente, en un plazo máximo de dos meses, el Consejo de Ministros imponga la sanción definitiva. La multa, que, aunque no sea por su cuantía, "ha sido bastante dura" según una fuente del sector.La multa, en efecto, no puede rebasar un máximo legal de 100 millones de pesetas ya que se ciñe a una normativa aneja, según dichas fuentes. Por ello, cuenta más el grado de la calificación -establecido en leve, grave y muy grave y, dentro de estas categoría, de mínimo, medio y máximo por el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN)- que recibe que la cantidad que tiene que pagarse, fácilmente asumible por cualquiera de las compañías que integran Hifrensa. La "grave irresponsabilidad" es comparable con calificación "grave en grado máximo".

Según el informe del instructor del Ministerio de Industria, los responsables de la nuclear violaron la autorización para operarla al no comunicar con tiempo los hechos ocurridos -tardaron hasta dos horas en algunos casos cuando lo normal es hacerlo antes de 10 minutos- y al aportar información insuficiente. Según las conclusiones, al ser una emergencia real era necesaria una información completa para que se pusieran en marcha todos los mecanismos.

La conclusión de Industria fue calificada de excesiva por los responsables de Hifrensa, que habían contestado que no se habían producido víctimas y que tampoco había afectado a los equipos nucleares. No obstante, sí pudieron producirse accidentes graves en personas, según las instrucciones.

En ese sentido, los hechos ocurridos en Vandellós 1 se pueden calificar como accidente desde el punto de vista global "ya que hubo un incendio y se corrió peligro". Sin embargo, desde el punto de vista de escala nuclear, se califican como incidente ya que no tuvo efecto radiológico y no llegó a afectar a la isla nuclear ni se perdió el control de los equipos nucleares.