_
_
_
_

Transportes y servicios médicos disparan los precios en enero un 1,2%

En la recta de salida de este año, los precios han subido un 1,2%, una pérdida de terreno importante si se tiene en cuenta que la meta para 1991 fijada por el Gobierno está en el 5%. Este incremento, entre los más elevados de los últimos ejercicios, se debe a las subidas en todos los productos salvo alimentación; en especial, los servicios médicos (4,2%) y el transporte (3,3%).

A pesar de que en el mes de enero se producen las tradicionales rebajas, los precios oficiales, según el índice que elabora el Instituto Nacional de Estadística, han subido un 1,2%. Este incremento es superior al del mismo mes del año pasado (1%) y ello es debido, según el Ministerio de Economía y Hacienda, a que se han adelantado a enero las subidas de las tarifas eléctricas y de las viviendas de protección oficial que habitualmente se producen en febrero.Por ello, Economía señala que todavía es pronto para hablar de "un cambio en la tendencia descendente de la inflación observada en los últimos meses" Por el contrario, los sindicatos mencionan que se ha producido "un rebrote inflacionista" y en base a ello justifican sus reivindicaciones salariales para la negociación colectiva de este año.

El ministro de Economía y Hacienda, Carlos Solchaga, manifestó ayer, tras su comparecencia en el Senado, que "el aumento del 1,2% es un resultado me nos malo de lo que aparenta". El ministro afirmó que le preocupaba primordialmente el "agarrotamiento que están sufriendo lo agentes económicos como consecuencia del estallido de la guerra del Golfo".

Este mal resultado de enero, sitúa la inflación de los últimos doce meses en un 6,7% (enero de este año sobre el mismo mes del año anterior), dos décimas por encima de la tasa registrada a final del pasado año (6,5%) y en el mismo nivel en que se ericontraba en enero del pasado ;año. Se ha perdido, pues, una parte del terreno a recuperar para situar los precios a final del ejercicio en un 5%, tal como se pro pone el Gobierno.

Otro dato negativo es la denominada inflación subyacente, es decir, la que mide los precios sin contar los de la energía y los alimentos frescos. En enero, el incremento ha sido del 1,4%, el más elevado de los últimos años. Su tasa de los últimos doce meses se ha situado en el 6,8%, frente al 6,1% con que acabó el pasado año.

La razón es paradójica ya que mientras los alimentos frescos, los precios más volubles en teoría, se han comportado de forma estable en los últimos meses, los restantes productos no dan más que sobresaltos. Así, los alímentos no elaborados han descendido en enero un 0,2% y los elaborados han subido en este mismo porcentaje. El componente no alimenticio del IPC ha crecido, por el contrario, un 1,8%.

En tasas de variación anual, el grupo alimenticio del IPC se encontraba en enero pasado en un moderado 3,6%, en contraposición al 8,4% que alcanzaron los restantes productos.

La subida en los precios de los carburantes de los primeros días de enero se ha reflejado, por su de enero se ha reflejado, por su parte, en un aumento en el sector del transporte (3,3%), aunque se mantuvo estable a partir de mediados de mes. También la vivienda (2,2%) ha acusado el impacto del incremento en las de protección oficial y de la revisión al alza de las tarifas eléctricas.

La brecha entre los precios de los productos industriales y los de los servicios se ha abierto un poco más en enero, ya que mientras los primeros subieron un 0,2%, los segundos (sin alquile res) lo hicieron en un 2,7%. Sus tasas anuales de variación se encuentran en enero en el 4% y el 11,3%, respectivamente.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_