_
_
_
_
Tribuna:
Tribuna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las tribunas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

La tesis del holocausto

Existe una diferencia contundente entre lo bélico y la cooperación económica. Eso es lo que muchos seguían creyendo. Akio Morita, el presidente de la Corporación Sony, es uno de los más firmes devotos de esta diferencia que se opone al principio de que jamás se construyó un imperio sin potencia militar. Los japoneses, partidarios del poder de la información, han defendido durante las últimas décadas que la rapidez de las comunicaciones -algunos expertos han utilizado el principio de la era del capitalismo informativo- ha de salvar a la humanidad del holocausto, porque las ideas llegan a todos en igualdad de condiciones. Esto último es bastante cierto si se trata de mercados, pero la experiencia está al borde de demostrar que no se trata de un axioma. Con o sin información, la crisis bélica a punto de estallar puso ayer el barril de crudo por las nubes y la reacción de los mercados ha resultado calamitosa como era de prever, a pesar de la contratación mundial en tiempo real y de la capacidad técnica de cobertura que despliegan los brokers internacionales. En renta variable la desolación es absoluta, y si todavía hay acciones que cambian de manos es porque la lógica mercantil del sistema tiene también el componente de su propia inercia.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_