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Los polémicos proyectos del aeropuerto

El plan para ampliar Barajas coincide con uno hecho por UCD en 1981

El diseño de las pistas contemplado en el proyecto de ampliación del aeropuerto de Barajas presentado el miércoles por el ministro de Transportes, José Barrionuevo, coincide con el elaborado en 1981 por el Gobierno de UCD. Aquel plan encendió las protestas de los vecinos de Coslada, San Fernando de Henares y los barrios cercanos a las Instalaciones aéreas.Aquellas movilizaciones se repetirán impulsadas por la recién creada Coordinadora Contra la Ampliación del Aeropuerto, que se presentó ayer, y que considera "que la propuesta y sus consecuencias son las mismas". De hecho, algunos miembros de esta asociación, entre ellos el Ayuntamiento de Coslada, ya participaron en la batalla que finalmente ganaron, toda vez que en 1984 el plan se archivó.

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En 1982, con Luis Gamir como ministro de Transportes, se hizo público un proyecto de ampliación diseñado por la entonces Subsecretaría de Aviación Civil. En él se contemplaba la construcción de tres nuevas pistas en sentido Norte Sur, según se publicó en febrero de aquel año. Al igual que en el, nuevo plan, Barajas hubiera contado al final de las obras con cuatro pistas paralelas dos a dos. Entonces se planeó aprovechar, al igual que ahora, una de las dos pistas actuales y dejar de reserva la otra, la única que no mira al Norte.

El coste del proyecto era de unos 6.000 millones de pesetas. El actual está presupuestado en 200.000 millones, aunque incluye una ciudad aeroportuarla con servicios complementarios que no estaba prevista en el anterior documento.

Luis Cañizo, director general de Infraestructura y Transportes durante 1981 y 1982, recuerda que "a aquel proyecto no se le hizo mucho caso porque estábamos al borde del Munidal de fútbol". "El asunto terminó de enfriarse tras realizarse una ampliación en las terminales de Barajas".

Pasa a la página 3

Los vecinos recurrirán a la CE el plan de Barajas por no tener estudio ambiental

Viene de la página 1Las manifestaciones arreciaron en 1983 tras publicarse el decreto de expropiación de los terrenos necesarios para la ampliación de Barajas. La coordinadora antiampliación recordó ayer en su constitución aquellas movilizaciones.

"Entonces conseguimos que se archivara el proyecto, el mismo que el actual, ya que Transportes reconoció que era una grave amenaza contra el medio ambiente", comentó uno de los miembros. "Lo único que ha cambiado es el número de afectados, antes eramos 100.000 y ahora medio millón".

La coordinadora piensa denunciar la ampliación en los tribunales europeos. El primer recurso lo van a plantear en la CE, "ya que el proyecto carece de estudio de impacto ambiental, como es preceptivo", comentó Ivan Petrovich, de la asociación ecologista Aedenat, integrante de la coordinadora.

Los vecinos afirman que se intenta justificar" la ampliación con cifras distorsionadas. "Entre 1980 y 1986 la demanda se estancó en 10 millones de pasajeros por año.

Sólo en los últimos años hubo incremento, pero difícilmente se podrá llegar a los 80 millones de viajeros por año previstos por el Gobierno", dijo Petrovich.

Cifras hinchadas

"Son cifras hinchadas que olvidan que el turismo ha descendido y que Iberia tendrá este año unas pérdidas de 20.000 millones", comentó Petrovich.

Juan Ramón Sanz, concejal de Urbanismo de Coslada, recordó que, sólo en el barrio de la Estación, 4.000 personas sufren el paso de una. aeronave cada 2 o 3 minutos, "Hace unos meses las turbulencias de un avión levantaron el tejado de una casa. Nadie se ha responsabilizado de ello", afirmó.

Prisciliano Castro, presidente de la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos, hizo el siguiente comentario: "Este parece un país de faraones. Sólo se hacen obras faraónicás, de escaparate político". Los vecinos compararon la "cicatería" de la Administración para invertir en el metro y las cercanías "con los 200.000 millones que se pretenden gastar en una obra innecesaria".

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