EE UU desmiente que Baker vaya a viajar a Bagdad el 9 de enero

El Departamento de Estado norteamericano desmintió ayer que su titular, James Baker, vaya a viajar a Bagdad el 9 de enero para entrevistarse con el líder iraquí, Sadam Husein. El desmentido se produjo horas después de que el diario israelí Maariv publicará tal información, facilitada por medios diplomáticos estadounidenses e israelíes.

El Gobierno norteamericano desmintió ayer la noticia del diario de Tel Aviv y no hizo comentarios sobre las supuestas negociaciones secretas entre Washington y Bagdad. Un portavoz oficial reconoció que han existido contactos, ya reconocidos públicamente, a través de la delegación norteamericana en Irak encabezada por Joseph Wilson, pero que todos los esfuerzos para desbloquear la situación han resultado inútiles. "No hay ningún movimiento en el tema de las fechas del encuentro entre Baker y Sadam", dijo el portavoz.Los intentos de la Administración norteamericana de entablar un diálogo con Husein parecen más que bloqueados. El presidente, George Bush, continuaba ayer descansando en su residencia de Camp David (Maryland), el secretario de Estado se hallaba pescando en Tejas y el vicepresideente, Dan Quayle, esquiando en Colorado.

Mientras la cúspide política de EE UU disfruta sus vacaciones navideñas, en el Pentágono se registra una actividad febril. Mandos militares confirmaron ayer que algunas de las unidades desplegadas en Arabla Saudí aún no están preparadas para iniciar una ofensiva, tal y como declaró la pasada semana el teniente general Calvin Waller.

"El plazo que termina el día 15 fue impuesto por los diplomáticos, y no es un plazo militar", explican algunos altos mandos del Pentágono, que recuerdan que la segunda oleada de tropas enviada a Arabia Saudí estará lista para el combate en febrero.

Las únicas unidades preparadas ya para la guerra son las fuerzas aéreas y los marines. Se espera además que los portaviones Theodore Roosevelt y America lleguen al mar Rojo antes del 15 de enero. Si alcanzan su objetivo en la fecha prevista, el día que se cumple el ultimátum de la ONU Washington tendrá en la zona del Golfo seis portaviones con Harriers, aviones invisibles F- 1 17A y F-18, fuerza capaz de asestar un duro golpe a Irak sin movilizar las tropas de infantería.Mejor esperar

El general Norman Schwarzkopf, comandante en jefe de las fuerzas expedicionarias, norteamericanas en la zona, considera que la infantería no está preparada para iniciar una ofensiva y que muchas unidades aún se encuentran en el proceso de aclimatación a la temperatura y características de la zona. Schwarzkopf es uno de los militares que ha solicitado reiteradamente al Pentágono que el poder civil no precipite los planes militares sin contar con la aprobación del Departamento de Defensa.

Bush no ha valorado públicamente esta situación, aunque fuentes de la Casa Blanca han explicado que los consejos que ha recibido de Cheney y del general Colin Powell, jefe de la junta de jefes de Estado Mayor, han sido claros: EE UU sufrira un número inferior de bajas cuanto más preparadas estén sus unidades para entrar en combate. El Pentágono también se muestra interesado en que el plazo del día 15 impuesto por las Naciones Unidas no afecte psicologicamente a las tropas estadounidenses.

Sobre este particular, el Departamento de Estado cursó órdenes ayer a su personal diplomático en Jordania y Sudán para que estuvieran listos para ser evacuados antes de esa fecha de enero, dada la situación inestable y en previsión de manifestaciones anti-norteamericanas.

Entre tanto, las autoridades del ocupado emirato de Kuwait prosiguen su labor diplomática. Ayer fue el emir, jeque Al Sabaj, el que viajó a China para discutir la situacion en el Golfo.