Esto es una ruina

El trasiego de magrebíes es incesante: en el paso fronterizo que separa Ceuta de Marruecos. Acuden a Ceuta desde todas partes del reino de Hassan, atiborran sus vehículos de artículos exentos de impuestos y los cuelan para su venta en los países del Magreb. Les cuesta trabajo dar crédito a la noticia y responden con un "¡Uf... cuando la escuchan -"eso es una ruina para Ceuta", reflexiona la mayoría- Al otro lado del atestado paso fronterizo, los escaparates ceutíes muestran miles de artículos: radiocasetes, televisiones... Parecen ajenos a la decisión del Gobierno espanol de exigir, a partir del 1 de marzo, un visado para franquear las hasta ahora libres aduanas cle Ceuta y Melilla.

El líder de la Comunidad Musulmana de Ceuta, Ahmed Subaire, es taxativo: "La imposición de un visado para entrar en Ceuta no es razonable; esta medida debe anularse, pues el 75% del comercio exterior ceutí lo absorbe Marruecos"."Pasan muchísimas personas todos los días; casi siempre son las mismas", afirma un policía español sin parar de revisar pasaportes. Algunos pasan tantas veces al cabo del día que ni les pide el pasaporte. "Mire éste", señala a un automovilista que acaba de franquear la aduana con el coche cargado de bolsas: "Es valenciano, trabaja en Ceuta y vive en Castillejo [localidad marroquí muy próxiina al enclave español]. Vive como Dios: tiene un buen sueldo, un chalé, e incluso, por 10.000 pesetas al mes, se permite el lujo de tener una sirvienta marroquí en casa". "Aún no sé qué van a hacer, pero como tengan que pedir un visado cada vez que entren ......

El delegado del Gobierno en Ceuta, Pedro Miguel González Márquez, está convericido -y así lo ha explicado en los últimos días a los representantes políticos de su ciudad- de que la medida "no va a suponer ningún perjuicio económico". La imposicion del visado afectará a los súbditos marroquíes, argelinos y tunecinos que entren en Ceuta o Melilla. Sin embargo, no regirá, sostiene el delegado del Gobierno, para los vecinos de las provincias limítrofes de Tetuán y Nador, cuyos vecinos tendrán el tratamiento de fronterizos y podrán acceder a ambos enclaves españoles con sólo exhibir, como hasta ahora, el pasaporte. "Eso sí, no podrán pernoctar en la ciudad", matiza González Márquez. El Gobierno español, según González, va a denunciar, para poder aplicar esta medida, el convenio suscrito con Marruecos que permitía franquear la frontera libremente.

"Se van a cargar Ceuta"

Los comerciantes ceutíes se echan las manos a la cabeza cuando escuchan las trabas burocráticas que, en aplicación de una resolución de la Comunidad Europea (CE), van a tener que superar los súbditos del rey Hassan para cruzar la frontera, y aseguran: "Se van a cargar Ceuta... Estamos obligados a vivir en común con los norteafricanos"', razona un taxista ceutí."Lo del visado a mí no me afecta, aunque viva en Castillejo; tengo nacionalidad española y puedo entrar cuantas veces quiera", expresa Omkeltmo Haddad en perfecto castellano. "Lo peor", asegura, "es que ellos [los marroquíes] hagan lo mismo y, en venganza, nos lo pidan a nosotros". Haddad que se dedica a la venta ambulante, realiza sus compras en Ceuta. "Hoy he gastado 500.000 pesetas. ¡Mire!".

"Me atrevo a decir que las autoridades de Marruecos han aceptado [la imposición del visado] y que no va haber reacciones. Si las hubiera, tendrían que darnos, como nosotros a ellos, el tratamiento de rayanos", argumenta el representante del Gobierno español en Ceuta. Y explica: "Aquí no se está cuestionando la españolidad de Ceuta; se trata de salvaguardar los intereses de nuestra ciudad, integrada en un país miembro de la Comunidad Europea".

José María Campos Martínez, presidente de la Cámara de Comercio de Ceuta, lo tiene claro: "Cualquier medida que cortapise el acceso magrebí a Ceuta pone en peligro nuestra economía. Los turistas marroquíes dejarán de venir si les ponen trabas, y no podemos olvidar que un 40% del turismo ceutí se compone de ciudadanos de Marruecos".

"Como siempre, han adoptado esta medida sin consultar antes con los estamentos que realmente deben opinar al respecto", se queja. También advierte: "Si restringen o limitan la entrada, en vez de comprarnos a nosotros se irán a Gibraltar" . "A Ceuta le están cortando cada vez más sus salidas económicas: el diferencial de precios con la Península es cada vez menor, las comunicaciones con Algeciras son desastrosas y la actividad del puerto está muv reducida", arguye.

A Fátima Mohamed, nacionalizada española y residente en la paupérrirna barriada ceutí del Príncipe Alfonso, le parece "muy bien" que se restrinja el acceso de magrebíes. Opina que están precarizando el empleo en Ceuta. "Los indocumentados nos están quitando el trabajo: hacen cualquier cosa por menos dinero, y los empresarios, lógicamente, los contratan a ellos".

5.000 indocumentados

En la actualidad, según datos de Alimed Subaíre, hay unos 23.000 magrebíes en Ceuta. De ellos, 12.000 ostentan nacionalidad española, 6.000 no la tienen aún y otros 5.000 estan indocumentados. Subaire considera inviable la imposición del vísado, aunque apuesta por una impermeabilización de la frontera: "Esta ciudad no se puede amparar en chorizos, maleantes y traficantes de drogas: pero éste es un problierna que debe solucionar el Gobierno, no la Comunidad Europea con el visado". La Delegación del Gobierilo prepara en la actualidad un plan de impermeabilización que incluye un control más estricto del paso fronterizo (que se extiende siete kilómetros y medio por una abrupta orografía), custodiado ahora por guardias civiles. El delegado gubernamental admite que diariamente "son devueltos a Marruecos una media de 12 extranjeros indocumentados" que se cuelan en Ceuta a través de los montes.