Las rebajas de la gasolina facilitan una nueva subida vía impuestos de cinco pesetas en enero

La recuperación experimentada en el precio de la gasolina en los dos últimos meses, que ha supuesto pasar de 94 a 86 pesetas en la gasolina súper desde finales de octubre, permite al Gobierno abordar el aumento del impuesto de hidrocarburos previsto para el próximo año en condiciones menos traumáticas. Esto significa que, tras aprobarse los Presupuestos Generales del Estado, la gasolina subirá 5,60 pesetas, correspondientes a cinco pesetas lineales del impuesto en sí más la aplicación de un IVA del 12%. Campsa redujo ayer la súper una peseta para situarla en 86 pesetas por litro.

El precio de venta al público de los carburantes está compuesto de tres términos. Por un lado, un precio fijo, que es el impuesto de hidrocarburos; por otro, el precio máximo antes de impuestos, y, por último, de la aplicación de un 12% de IVA a la suma de los términos anteriores. Es decir, el impuesto de hidrocarburos se refleja directamente en el precio de venta al público y es el único sobre el que no se puede jugar a la hora de controlar la inflación. Esto se hace con el máximo, ya que éste fija un techo que no se puede rebasar.Ante eso, el Ejecutivo, después de decidir un aumento lineal de cinco pesetas para el impuesto de hidrocarburos -agrupa el antiguo impuesto especial y la renta de petróleo que existía tras la liberalización de precios- en los distintos carburantes, temía que el crecimiento continuo que estaban teniendo los precios máximos por la repercusión de la crisis del Golfo obligara a revisar a la baja la propuesta inicial o bien despegarse de los máximos con el objeto de que no se llegase a cifras "demasiado elevadas", según comentan fuentes de la Administración, que tenían especial temor a llegar a tres dígitos (100 pesetas por litro).

Recuperación

Sin embargo, tras las últimas cuatro revisiones el precio de los carburantes -la última fue ayer y se redujo una peseta- la gasolina súper, que es la que copa la mayor parte del mercado de carburantes, ha pasado de 94 a 86 pesetas, lo que ha significado la recuperación de ocho de las 15 pesetas que había subido entre el 10 de julio y el 1 de octubre. Esta reducción se ha producido tras la caída de los precios internacionales del petróleo y de las tarifas medias en los países de la Comunidad Europea sobre los que se estipula el precio español.Según las previsiones con las que cuentan en el sector petrolero, de ahora a fin de año la evolución del precio de las gasolinas puede caer todavía entre dos y tres pesetas frente a las 86 actuales, por lo que el primer precio de venta al público del próximo año, una vez aumentadas las 5,60 pesetas del impuesto, rondaría las 89/90 pesetas. Es decir, un precio que está por debajo de las 94 pesetas que alcanzó durante el mes de octubre y, por tanto, que no sería traumatizante para los consumidores.

Actualmente, el impuesto de hidrocarburos es de 43,50 pesetas para la gasolian súper y para la normal. Para la gasolina sin plomo es de 38,50 pesetas, precio que se redujo cinco pesetas cuando se estableció el nuevo sistema de precios con el objetivo de apoyar el consumo de este tipo de gasolina. Para el gasóleo A y B, utilizado en automoción es de 27,30 pesetas, mientras el gasóleo C, o de calefacción, es de 10 pesetas. El fuel tiene un impuesto de 1.700 pesetas.

Tras la revisión todos subirán -excepto el gasóleo C y el fuel- cinco pesetas, cantidad que, con la aplicación del 12% del IVA, representa una subida real de 5,60 pesetas. Es decir, para la súper el nuevo impuesto es de 48,50, y tras aplicar el IVA de 54,32 pesetas.

Por debajo de la CE

Esta cifra sigue por debajo de la media de los impuestos que actualmente tiene los seis países de referencia de la CE (Francia, Italia, Reino Unido, Alemania, Holanda y Bélgica), que es de 50,03 pesetas y sobre la que se aplica un IVA del 18,4%. En los seis países mencionados, el impuesto para el gasóleo A y B es de 29,71 con un IVA del 18,4%; para el C, de 11, 18 con un IVA del 14,5% y para el fuel de 2.517 pesetas por tonelada con un IVA del 12,9%.Los impuestos, en cualquier caso, deben ser aprobados por el Parlamento junto con la ley de Presupuesto Generales del Estado, que ahora se encuentra en el Senado. No obstante, se espera que esté lista para principios de año, de manera que pueda aplicarse de forma inmediata. Sobre este aspecto, algunas fuentes sectoriales han pedido que se haga un mayor aumento de las gasolinas y algo menor del gasóleo, con lo que se acercaría más a los impuestos comunitarios.

Los precios, por otra parte, tuvieron ayer una nueva revisión. Campsa, encargada de fijar los precios para las gasolineras que están englobadas en la antigua red del monopolio, ha estipulado los siogueintes precios de venta al público: 86 pesetas para la súper; 83 pesetas para la gasolina sin plomo; 82 para la normal; 70,80 para el gasóleo de automoción; 50,6 para el gasóleo C de venta en gasolineras y 47,80 para el C de venta a granel (3.000 litro mínimo). En el caso de las gasolineras ha bajado en las tres una pesetas. En los gasóleos, ha subido en todas 0,60 pesetas.

El nuevo sistema de precios se comenzó a aplicar desde el 10 de julio de este año como último paso de la liberalización acordada entre España y la CE. Este sistema se centra en la existencia de un precio máximo que se fija en la media de los precios de los mercados internacionales de combustibles de Rotterdam y Génova, la media de seis países de la CE y una adición de dos pesetas.