El pan de los reclusos

Leo con sorpresa la noticia publicada en su diario el pasado día 27, donde, bajo el titular Los presos de Logroño se quejan de que los ratones se comen el pan, se informa que, entre otras cosas, "hay gran malestar a causa de los ratones que pululan por doquier, que sienten especial atracción por el pan".Frente a esta información quisiera puntualizar:

1. El pan que, cada día y en cantidad más que suficiente, se entrega a los internos está envasado y precintado por la empresa suministradora.

2. El equipo médico del establecimiento controla la calidad y cantidad de los productos alimenticios y de consumo que son entregados a los internos.

3. La cocina del centro y los almacenes son inspeccionados periódicamente por los servicios de la comunidad autónoma.

4. Periódicamente se efectúan campañas de desinsectación y desratización por empresas especializadas; no obstante, esto no es óbice para que en algún caso haya podido detectarse la presencia de algún roedor, ya que debe tenerse en cuenta que el centro se encuentra situado fuera del casco urbano y, evidentemente, ni yo ni nadie puede garantizar que no se cuele algún ratoncillo de campo.

Lo que sí estoy en condiciones de asegurar es que ni existe malestar entre la población reclusa del establecimiento ni que de momento sea necesaria la presencia del flautista de Hamelín.-

Director del Centro Penitenciario de Cumplimiento y Preventivos.