Jesulín de Ubrique encabeza el escalafón de novilleros
Jesulín de Ubrique encabezó el escalafón de novilleros de en la temporada española de 1990, en cuanto a número de actuaciones, con amplia diferencia con respecto a sus más inmediatos seguidores. En cuanto a promedios referidos a la relación actuaciones / trofeos, en cambio, sólo fue el mejor en plazas de segunda categoría.
Los cinco primeros por promedio, Pepín Liria (2,33 orejas por tarde), José Antonio Valencia (2,27), El Tato (2), Antonio Cutiño (1,66) y Juan Carlos García (1,64), son novilleros que actuaron poco y principalmente en cosos de tercera, donde es más fácil cortar orejas. Tres de ellos, Liria, Valencia y Cutiño, no hicieron ni un sólo paseíllo en las plazas de primera categoría.
Tras ellos se encuentran los novilleros considerados figuras: Julián Zamora (1,50 de promedio), Manuel Caballero (1,46), Francisco Javier (1,44), Jesulín (1,41), Vicente Bejarano (1,31) y Chiquilín (1,29). Los tres peores promedios son los de Antonio Punta (0,76), y Sánchez Mejías y Luis de Pauloba (0,58).
En las plazas de primera categoría el triunfador fue Manuel Caballero, que salió a hombros por las puertas grandes de Las Ventas y de la Monumental de Barcelona, y por la Puerta del Príncipe de la Maestranza de Sevilla. Caballero obtuvo un promedio de oreja por tarde. Le siguen Finito de Córdoba (0,92), Chiquilín (0,90), Jesulín de Ubrique y Paco Senda (0,85). En las de segunda, el mejor fue Jesulín (1,39), seguido de Caballero (1,35), Chamaco (1,22), Cristo González (1,20) y Chiqulín (1,16), entre cuantos novilleros actuaron un mínimo de 10 tardes.
Caballero es el mejor en cuanto a promedios globales, con 1,85, seguido de Cristo González (1,68), Jesulín y Chamaco (1,60) y Chiquilín (1,58).
Por lo que respecta a la temporada en Francia, Juan Mora y Víctor Mendes fueron los que más actuaron, y Mora obtuvo el mejor promedio actuaciones trofeos.