Desarticulada una banda que distribuía 300 kilos de cocaína al mes

Madrid - 25 nov 1990 - 00:00CET

La policía completó ayer la operación iniciada el sábado día 17 para desarticular la que considera "banda de narcotraficantes más importante que operaba en Madrid". Con la detención de ocho colombianos y un español y la aprehensión de 70 kilos de cocaína, el servicio policial de estupefacientes asegura que ha desmantelado una compleja organización vinculada al cartel de Medellín, que controlaba cada mes la distribución de unos 300 kilos de cocaína. La operación, desplegada desde hace tres meses a raíz del arresto de un camello colombiano, se ha saldado con un total de 17 detenidos, 193 kilos de cocaína decomisados y la intrevención de casi 150 millones de pesetas en efectivo. Según fuentes policiales, la droga aprehendida podría haber sido vendida, después de los sucesivos cortes y manipulaciones, por más de 8.000 millones. La banda actuaba como mayorista de los carteles de Cali y Medellín en la zona centro de la Península, e introducía cada mes desde Portugal alijos de hasta 300 kilos de droga. La policía ha tenido que recurrir a la informática para descifrar los documentos en clave utilizados por los narcotraficantes, que también disponían de mensáfonos con cobertura en todo el territorio nacional para permanecer en contacto. El pasado lunes, horas después de hacerse pública la primera fase de la operación, (véase EL PAÍS del 20 de noviembre), funcionarios del Servicio Central de Estupefacientes localizaron 50 kilos de cocaína en un chalé de Villanueva de la Cañada. El contrato de alquiler fue suscrito, con documentación falsa, por el colombiano Jairo Muñoz Buitrago, considerado responsable logístico de la organización y que había alquilado otras viviendas en Aravaca y Las Rozas. Jairo Muñoz fue detenido el miércoles cuando ocultaba en su automóvil otros 20 kilos de cocaína. Pasa a la Página 3

Los 'narcos' actuaban como un "comando terrorista"

Viene de la página 1La documentación intervenida a los narcotraficantes hace una semana fue utilizada por la policía para desenmarañar el complejo organigrama de la organización, que operaba mediante células independientes situadas bajo el control directo del jefe de la banda, Francisco Javier Mora, de 26 años. El portavoz de la Dirección General de la Policía considera que los narcotraficantes actuaban "como una organización terrorista". El grupo disponía de al menos seis pisos francos y había comprado o alquilado varios vehículos.

A lo largo de esta semana se fueron sucediendo los arrestos de los integrantes de la banda. Martha Georgina Bello de Restrepo Toro y Alexander Amaya Fonseca actuaban como distribuidores al por mayor de la cocaína, con cargamentos que oscilaban entre los tres y los 20 kilos. Mientras tanto, los también colombianos Agustín Rodríguez Ortiz, Pedro Peternina Vergara, Gildardo Reyes Chiquiza, Carlos Lulio Martínez Parra y Nora Ángela Londoño Castro, así como el ciudadano español de origen marroquí Mohamed Tensamanl, apoyaban a los dos anteriores mediante operaciones de vigilancia y transporte.

En el organigrama de la banda figuran, además de Francisco Javier Mora, Flor Aydé Lancheros Quiñones, como responsable de las finanzas y la contabilidad del grupo, y Octavio Duque Ramírez.

Hoteles de lujo

Ramirez era el encargado de custodiar los alijos en los pisos alquilados, aunque la mayor parte de los integrantes de la banda residía en hoteles de lujo.

Un vecino de la urbanización Villafranca del Castillo, colindante al lugar donde se incautó la droga, confirmó ayer que en la tarde del pasado miércoles se observaba un amplio despliegue policial, informa Luis Esteban. Sobre las 23.30, detuvieron a dos, hombres y dos mujeres, a quienes se vio salir esposados. Según, el testimonio del vecino, los inquilinos del chalé llevaban apenas una semana instalados en él y habían asegurado que eran dos matrimonios de nacionalidad costarricense.

La caleta o zulo donde se ocultaban 123 kilos de cocaína fue descubierta el pasado fin de semana en la urbanización El Tomillar, en Las Rozas. De forma simultánea fueron detenidos otros tres miembros de la banda en la Estación Sur de Autobuses de Madrid cuando iban a trasladarse a Málaga con 110 millones de pesetas.

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