Caro y seguro

N. S. DE T., En 1989, el parque español de reproductores de compactos estaba formado por 750.000 aparatos. Hoy supera el millón. "La introducción del compacto en España no ha sido tan rápida como en otros países dice Manuel Díaz, director de CBS España, "y esta incorporación tardía nos permite tener una gran reserva para el crecimiento, porque el proceso es irreversible".

Pero el disco compacto es caro. Según Manuel Díaz, en España un disco compacto sale de fábrica a un precio de 309 pesetas en una tirada de 1.000 ejemplares. A partir de esta cantidad, el precio es de 214 pesetas. "El coste de fabricación de un elepé es de 103 pesetas. Por esto son tan habituales las importaciones de discos compactos. La CBS fabrica en Austria, empaqueta en Holanda y el precio desde la primera unidad es de 250 pesetas, con fletes y aranceles incluidos".

Eusebio Rey, director técnico de Iberofón, empresa española dedicada a la fabricación de fonogramas, afirma que la fabricación de compactos requiere una tecnología nueva: "En tres años han aparecido tres generaciones de máquinas, y son los costes de amortización los que encarecen el producto, porque los precios de las materias primas de los elepés y, los compactos son muy simillares. Además, las tiradas en España son muy, pequeñas, y un disco compacto comienza a ser rentable cuando se fabrican 10.000 unidades, algo que está al alcance de muy pocos artistas".

Las previsiones de ventas de compactos en España para 1990 mantienen el crecimiento. Hasta el mes de octubre de este año se han vendido 4,5 millones de discos compactos (2,9 millones durante el mismo periodo en 1989), y hasta final de año esta cifra puede aumentar en un 40%. El elepé continúa ala baja, con 11,5 millones vendidos desde enero a octubre (13 millones en 1989). El compacto tiene porvenir. Caro y seguro.