La crisis política y económica dispara las críticas al programa espacial de la URSS

La nueva situación política y económica de la URSS está teniendo impacto en los programas espaciales soviéticos, según los científicos que han participado en la reunión del Grupo Consultivo de Interagencias para la Ciencia Espacial (IAGG) celebrada esta semana en Santa Cruz de Tenerife (Canarias). Todos reconocen la existencia de una crítica social a su trabajo y no descartan recortes presupuestarios en el futuro. "Mucha gente cree que es mejor llenar las tiendas que ir al espacio", comenta Rasaid Sunyaev, jefe del departamento de astrofísica del Instituto de Investigaciones Cósmicas.

A la reunión del IACG, organizada por la Administración Europea del Espacio (ESA) y el Instituto Astrofísico de Canarias, han asistido los máximos responsables científicos de la NASA, el Instituto de Investigaciones Cósmicas (IKI) de la URSS, el Instituto de Ciencias Espaciales y Austronáutica (ISAS) de Japón y de la ESA. En este marco se ha comentado que los soviéticos pueden ir alargando los plazos previstos para sus programas.Ante esto, el director del IKI afirma que "no hay reducciones presupuestarias para la ciencia espacial, pero es una cuestión imprevisible". Reconoce que en su país se empiezan a cuestionar los fondos que se destinan a la carrera espacial, pero puntualiza que "también se entiende que estamos muy avanzados en este sector, que es fácil perder la experiencia y sería muy caro recuperarla". Stinyaev considera que habrá recortes económicos, pero que afectarán sobre todo a las aplicaciones militares y que las reducciones en el gasto de defensa revertirán favorablemente en la ciencia espacial.

Alexéi Galeev, director del Instituto de Investigaciones Cósmicas (IKI) de la URSS afirma que "en la ciencia espacial tuvimos la perestroika antes que el resto de la sociedad soviética, abrimos nuestras puertas a la cooperación internacional hace años y en este sentido no ha significado grandes cambios para nosotros".

El IKI pertenece a la Academia de Ciencias de la URSS Trabajan en él 400 científicos y se ocupa exclusivamente de investigaciones fundamentales "Nuestro programa prioritario de 1994 al 2001, es el envío de naves no tripuladas y robots de superficie a Marte", ha informado su director, un físico de 50 años procedente de la sección siberiana de la Academia de Ciencias.

El transbordador

La mayoría de las críticas de los soviéticos a su programa espacial se dirigen al transbordador espacial Buran, que hizo un vuelo no pilotado hace tres años y desde entonces no ha vuelto a salir del hangar. "Es un despilfarro de una cantidad colosal del dinero", ha dicho Sunyaev. "El Buran se ha criticado por ser una imitación del Shuttle estadounidense", ha comentado Galeev.Sin embargo, la estación orbital Mir tiene apoyo por parte de los científicos. "Está funcionando bien y no es un programa muy caro, el precio total, incluidos lanzamientos y gastos de operación durante los cinco años ha sido hasta ahora de 1.400 millones de rublos", ha dicho Sunyaev. La estación está actualmente formada por tres módulos científicos y tecnológicos más el cuerpo central de alojamiento para los cosmonautas. Está previsto, según ha informado Galeev, unir otros dos módulos, uno para observaciones científicas de la tierra en 1999. Es uno de los programas espaciales soviéticos en que los estadounidenses estarían más interesados. "La cooperación con la NASA es todavía insuficiente", opina el director del IKI. "Desde hace unos años tenemos relaciones científicas con los americanos, pero creo que ahora hay que pasar al nivel de la colaboración industrial, no hay decisiones firmes aún en este sentido, pero lo estamos discutiendo".