Gobierno y ayuntamientos edificarán en 1991 viviendas estudiantiles que costarán 12.000 pesetas de alquiler
El Consejo de Ministros aprobará en enero de 1991 el primer Plan Integral de Juventud, que contempla, entre 240 medidas, la construcción de viviendas en régimen de alquiler para estudiantes desplazados. Los primeros 600 apartamentos, de dos plazas cada uno, empezarán a edificarse el próximo año en Granada, Málaga y Valencia, en colaboración con las diferentes comunidades autónomas, y sus alquileres no rebasarán las 12.000 pesetas, según explicó ayer el director del Instituto de la Juventud, Magdy Martínez Solimán.
Los nuevos edificios constarán de 200 apartamentos con capacidad para 400 estudiantes y servicios comunes de recreo y lavandería. En invierno estarán destinados a estudiantes des plazados de sus ciudades y en periodo de vacaciones a los beneficiarlos del Instituto Nacional de Servicios Sociales (Inserso) y organismos de la tercera edad. La promoción del acceso juvenil a la vivienda se completa en el Plan Integral de la Juventud, avanzado ayer por Martínez Solimán, con la reforma prevista de la ley de arrendamientos urbanos y la propuesta de mayores beneficios fiscales para el arrendador.Los redactores del plan han partido de un análisis sobre la juventud española, que revela, en el tema de la vivienda, la existencia de un 14% de matrimonios jóvenes que deben permanecer durante un año en los domicilios de padres y suegros ante la imposibilidad de contar con una casa propia. La escasez de apartamentos, que afecta principalmente a los estudiantes y a los jóvenes solos con cargas familiares, es uno de los motivos que retrasan la "transición a la edad adulta", a juicio de Martínez Solimán.
En la financiación del Plan Integral de Juventud, en torno a los dos billones de pesetas, intervendrá de forma importante el Ministerio de Defensa, ya que la reforma del servicio militar constituye uno de sus pilares. Además de las indemnizaciones aprobadas recientemente por el Gobierno, está previsto contratar un seguro para cada recluta con una entidad privada, así como mejorar las condiciones técnicas y humanas del servicio. "La mili debe ser un periodo de formación castrense y de compensación del déficit educativo. Todo, menos un servicio doméstico", dijo Martínez Solimán.
'Mili' de nueve meses
Los quintos de 1992 estrenarán la anunciada mili de nueve meses, aunque no está previsto rebajar la duración del servicio militar sustitutorio -actualmente de 18 meses-, "teniendo en cuenta que es más cómodo de realizar", apostilló el director general del Instituto de la Juventud. La ley de servicio civil que pretende desarrollarse contempla que esta prestación tenga también mayor duración que la militar, aunque será de carácter voluntario y, probablemente, remunerado.El resto de las medidas del plan se refieren a la educación, la calidad de vida y la política de empleo juvenil. En este sector se pretende consolidar el acceso al primer empleo, promover la contratación estable y, sobre todo, reducir la diferencia entre la creación de puestos de trabajo para hombres y para mujeres.
Otro proyecto novedoso es el desarrollo de una ley de jóvenes infractores que regularía el tratamiento penal de los menores de 16 años que hubieran cometido delitos y que podría entrar en vigor en 1993. La propuesta es sustituir las actuales instituciones carcelarlas por pisos tutelados y talleres de reinserción.
