Rechazada por la Audiencia Nacional la impugnación al sorteo de la 'mili'

La Audiencia Nacional ha rechazado suspender el sorteo del contingente del servicio militar para 1991 tal como había solicitado un joven licenciado en Derecho que se sintió discriminado porque la convocatoria excluía a las mujeres. La Audiencia ha declarado que el interés general "debe prevalecer sobre el particular".El sorteo de la mili, que fijará los destinos de 216.284 jóvenes, se celebrará el próximo domingo, día 11, tal como estaba previsto. "El acto recurrido", ha dicho el tribunal refiriéndose al sorteo, 11 es uno más en el desarrollo de las normas reguladoras del servicio militar, que determinan la identidad, sexo y condiciones de los llamados". "En el presente caso", añade, "el interés general debe prevalecer sobre el particular de algún recurrente concreto, interés que ha quedado sobradamente acreditado por el informe remitído por el Ministerio de Defensa, frente al nulo razonamiento de la parte recurrente".

En ocho escuetas líneas, la Sala de lo Contencioso-administrativo de la Audiencia Nacional ha desestimado el recurso de suspensión del sorteo de la mili solicitado por el joven alicantino Ángel Navarro, tras la deliberación mantenida ayer entre el presidente de la Sala, Juan Antonio Rossignoli y los magistrados Alfredo Roldán Herrero y José Luis Requero Ibáñez, éste último ponente de la resolución.

El auto ha resuelto el incidente de suspensión del sorteo pero no el fondo del recurso, sobre el que se pronunciará una sentencla definitiva dentro de unos meses.

Discriminación por sexo

El recurso planteado por el abogado José Pita en nombre de Ángel Navarro estimaba que la orden del Ministerio de Defensa de 10 de septiembre pasado, en la que se dictan las normas para el sorteo, no respeta el artículo 14 de la Constitución, según el cual ningún español podrá ser discriminado por razón de sexo. El recluta se sintió discriminado debido a que las mujeres están excluídas del servicio militar obligatorio. Ángel Navarro comentó ayer con cierta dosis de ironía que se sentía "alegre" por la sentencia que deniega lo solicitado, informa Jaime Esquembre desde Alicante."Aunque todavía no he leído el texto del auto", dijo Navarro a mediodía de ayer, las cosas no se razonan y hablan del interés general frente al particular, lo que me hace pensar que nos llevan a la mili por narices".

Para este joven licenciado en Derecho, este caso puede servir para que se plantee un debate sobre los límites de los intereses generales y particulares. "En esta ocasión", dijo, "se defendía el interés de 216.000 jóvenes españoles, que al parecer no vale un pimiento frente al interés general, pero a mí no me gusta que machaquen mis derechos fundamentales". Ángel Navarro y su abogado, José Pita, intentarán ahora una rápida apelación de la sentencia ante el Tribunal Supremo, y no descartan llegar al Constitucional.