200 guardias civiles desalojan a 19 jornaleros de un ayuntamiento de Huelva

Unos 200 guardias civiles, según testigos presenciales, intervinieron a las siete de la mañana de ayer en el desalojo de los 19 jornaleros, entre ellos dos mujeres, que desde el pasado jueves permanecían encerrados en el interior del Ayuntamiento de Paterna del Campo (Huelva) e impedían cualquier actividad municipal como protesta por el número de peonadas del Plan de Empleo Rural (PER). Quince esposas de jornaleros se encerraron ayer en protesta por la detención de sus maridos.

La Guardia Civil condujo a los detenidos en furgones celulares hasta el cuartel de La Palma del Condado, donde prestaron declaración y quedaron retenidos, en medio de una fuerte tensión en la calle: varias decenas de agricultores llegados de Paterna abuchearon a los agentes y corearon lemas como "Tierra, trabajo y libertad".El desconcierto fue aprovechado por unas 15 mujeres que a las dos de la tarde de ayer se introdujeron de nuevo en el Ayuntamiento de Paterna, acompañadas por el concejal de Herri Batasuna José Calero, aprovechando la ausencia de vigilantes y amenazaron al alcalde con emprender un nuevo encierro si la Guardia Civil no ponía en libertad a sus maridos. El alcalde de Paterna, el socialista Juan del Valle, declaró: "Como no se retiren voluntariamente, volveré a recurrir a la Guardia Civil para que los desaloje". El nuevo bloqueo de las dependencias municipales continuaba al cierre de esta edición.

La conflictividad social se ha desatado en Paterna, una localidad de 3.850 vecinos, desde que la pasada semana el alcalde expresó a los sindicatos la imposibilidad de otorgar 25 jornadas de trabajo a cada jornalero, como previamente había dispuesto el Instituto Andaluz de Reforma Agraria (IARA). Un grupo de trabajadores determinó el pasado jueves encerrarse indefinidamente en el Ayuntamiento como medida de protesta. El promotor de esta acción, José Fernández, uno de los dirigentes locales de CC OO, se encuentra entre los detenidos.

Denuncia del alcalde

El alcalde de Paterna puso una denuncia a últimas horas del lunes por la ocupación del Ayuntamiento, según un comunicado del Gobierno Civil de Huelva. En las acciones de desalojo intervinieron unos 200 guardias civiles. "Bloquearon las líneas telefónicas del pueblo e irrumpieron por sorpresa en el Ayuntamiento", comentó a este periódico un jornalero testigo de la actuación. "Algunos agricultores dormían atados con cadenas a las patas de la mesa del salón de plenos, pero los guardias llevaban herramientas y los sacaron a rastras", añadió.

El desalojo se desarolló sin incidentes, aunque algunos jornaleros lanzaron duras amenazas contra el alcalde. "Me dijeron que mis hijos iban a pagar por la denuncia, que yo había puesto. Yo soy el único responsable de la actuación de la Guardia Civil. Que dejen tranquila a mi familia y a los concejales", manifestó ayer Del Valle.

Los días del encierro transcurrieron en medio de un intercambio público de acusaciones entre los jornaleros y el alcalde. Del Valle definió la medida como "una actuación propia de los etarranos y batasunos de este pueblo".