Solchaga pronóstica un descenso de los tipos de interés y descarta subir el IVA

, El ministro de Economía, Carlos Solchaga, anunció ayer en el Congreso una próxima disminución de los tipos de interés, ya que "el presupuesto del próximo año permite augurar menores tensiones. A su juicio, "ahora, por primera vez, se puede decir que los tipos de interés pueden bajar gracias a la reducción del déficit público y al comportamiento restrictivo del gasto". Solchaga aseguró también que no modificaría los tipos de gravamen del IVA. "No es conveniente hacer ninguna modificación de esta naturaleza hasta que la Comunidad Europea se pronuncie en el proceso de armonización fiscal indirecto.

El titular de Economía no quiso, en los pasillos del Congreso, concretar "ni cuándo ni cuanto bajarán los tipos de interés". Este recorte se producirá, añadió, "cuando el Gobierno considere que una disminución de los intereses no va a poner en peligro la inflación". Esta medida de reactivación de la economía puede tomarse ahora, a juicio de Solchaga, porque "los presupuestos de 1991 son mas restrictivos, el sector público tendrá que emitir me nos deuda y, por tanto, no tendrá que ofrecer condiciones tan competitivas en el mercado de deuda". Además, añadió, el carácter restrictivo de los presupuestos facilitará la consolidación del enfriamiento y ya no será necesaria una política monetaria tan restrictiva.Como ocurrió durante el debate del Presupuesto del Estado para 1990, en la pasada primavera, el líder de la oposición, José María Aznar, y el titular de Economía, Carlos Solchaga coincidieron ayer en la llamada a un pacto de competitividad. Competitividad Aznar señaló que el debate sobre el Presupuesto de 1991 es "la última oportunidad" para alcanzar el consenso, mientras Solchaga señaló que el pacto de progreso "cobra ahora vigencia" cuando se registra un avance hacia la unión monetaria y europea. A juicio del líder de la oposición "se ha perdido un año vital en el camino hacia situar a la economía española en mejores condiciones de competitividad".

La inflación fue uno de los temas más discutidos. Solchaga afirmó que "hemos sido capaces de contener el repunte de la inflación a pesar de los aumentos salariales y estamos en condiciones de detener el deterioro exterior".En su respuesta al diputado de Izquierda Unida, Nicolás Sartorius, el ministro de Economía y Hacienda defendió, "el realismo" de la previsión de inflación del Gobierno -un 5%- para el próximo año. No obstante, reiteró que será más fácil de alcanzar con el respaldo de las fuerzas sociales, es decir, de la moderación de salarios y beneficios. Sobre el control de los beneficios, Solchaga afirmó que "el Gobierno no va a llevar al Parlamento una ley de fondos de inversión obligatorios para las empresas", pues considera "que no es necesaria una ley y se puede llegar a un pacto con sindicatos y patronal".. Ésta fue una de las referencias al pacto de competitividad que volverá a ponerse sobre la mesa de la concertación social tras las elecciones sindicales.

Solchaga hizo una clara mención a la caída de los beneficios empresariales durante su respuesta al diputado del grupo catalán, Miguel Roca. "¿Enfriar nos ha hecho más competitivos?", preguntó Roca. El ministro no respondió a esa pregunta, pero expuso una de las más claras muestras de enfriamiento: "Los beneficios que están declarando las empresas sobre sus fondos propios son este año de un tercio o un cuarto de lo que declararon en el primer semestre de 1989".

La medida de política económica anunciada para frenar esta tendencia es, precisamente, la reducción de tipos de interés. Como dato adicional, Solchaga descartó cualquier subida del IV A (impuesto sobre el valor añadido) de aquí a fin de año, "pues antes hay que esperar a los acuerdos de armonización fiscal indirecta que se alcancen en la Comunidad Europea".

El Presupuesto que ayer defendió el Solchaga no fue apoyado por los grupos de la oposición que ayer intervinieron en el debate: El Partido Popular, Convergència i Unió, Izquierda Unida y el CDS. Aznar justificó este rechazo porque el presupuesto "no es más que la prolongación del escaso éxito de la política seguida hasta ahora".