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LA CRISIS DEL GOLFO

Egipto busca una alianza, militar interárabe permanente

Ángeles Espinosa

Egipto está llevando a cabo contactos con varios países árabes, de cara a establecer algún tipo de alianza militar que impida,la repetición de una crisis como la desatada por la invasión iraquí de Kuwait, según ha podido saber EL PAÍS de fuentes gubernamentales. Una sugerencia en ese sentido efectuada a principios de este mes por el secretario de Estado norteamericano, James Baker, levantó los recelos del llamado bloque proiraquí, que expresó su temor a que se les imponga una especie de OTAN en Oriente Próximo."Creemos que, tras la solución política de la crisis, el futuro de la región debe reestructurarse de forma que se adopten medidas de seguridad interárabes en el Golfo, para defender tanto la tranquilidad de esos países como el abastecimiento de petróleo", aseguró a esta corresponsal Marriduj el Beltagui, responsable del Servicio de Información del Estado egipcio. Beltagui, que no señaló una fórmula concreta de defensa, insistió sin embargo en el carácter interárabe de la eventual alianza, y descartó cualquier similitud con la propuesta de Baker.

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En medios oficiales no se ha revelado cuáles son los países con los que las autoridades de El Cairo estudian dicho proyecto, pero, a tenor de los últimos acontecimientos, puede aventurarse que englobaría sobre todo a las monarquías petrolíferas del Golfo. Los países de la península Arábiga, con la sola excepción de Yemen, están agrupados en el Consejo de Cooperación del Golfo, una entente sobre todo económica. Incluso en el caso de un pacto defensivo, su capacidad estaría limitada de forma inevitable por la escasa- población de sus integrantes, en relación al espacio que ocupan.

Inoperancia

Por otra parte, la Liga de los Estados Árabes, único foro que agrupa a todos esos países de lengua y cultura común, dispone de un Tratado de Defensa Conjunta y Cooperación Económica, que se ha revelado inoperante. Creado en 1950 para complementar la Carta fundacional de la Liga, dio a la luz en 1964 un Mando Militar Árabe Unificado, con el objetivo de "coordinar las políticas militares para liberar Palestina", que resultó tan retórico como el Consejo de Defensa Conjunta y la Comisión Militar Permanente. Entre sus más sonados fracasos, la ausencia de resultados de la Fuerza de Disuasión enviada en 1976 a Líbano.

El problema vuelve a ser una vez más el del liderazgo y la des confianza árabe. ¿Se fiarán los eventuales participantes en una militar interárabe de la alianza mayor fuerza de uno de ellos? En este caso, Egipto, tradicional líder cultura¡ y político de los árabes hasta la firma de su tratado de paz con Israel, contaría con la ventaja inherente de su potencial humano, al menos 65 millones de personas, es decir, casi un tercio de la población árabe. Las mo narquías del Golfo, por su parte, cuentan con la capacidad financiera suficiente como para hacerse con el armamento más moderno y potente.

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Rechazo

Recientemente, el presidente egipcio, Mohamed Hosni Mubarak, ha revelado que su homólogo iraquí, Sadam Husein, le propuso un acuerdo de Defensa, que él rechazó porque tenía por objetivo hacerse con el control de la región. "Acuerdo de Defensa, ¿qué quiere decir eso?", se preguntaba Mubarak en un lenguaje coloquial ante un contingente de tropas listo para viajar a Arabia Saudí. "Eso quiere decir que conoces todos mis secretos, mis servicios de información, y un montón de cosas más", se contestó el propio jefe del Estado. Mubarak aseguró que los iraquíes habían insistido en un pacto de ese tipo en el seno del Consejo de Cooperación Árabe (Irak, Egipto, Jordania y Yemen), hasta 10 días antes de la invasión de Kuwait.

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Sobre la firma

Ángeles Espinosa
Analista sobre asuntos del mundo árabe e islámico. Ex corresponsal en Dubái, Teherán, Bagdad, El Cairo y Beirut. Ha escrito 'El tiempo de las mujeres', 'El Reino del Desierto' y 'Días de Guerra'. Licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense (Madrid) y Máster en Relaciones Internacionales por SAIS (Washington DC).

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