La prueba de la camiseta de Bob Marley
Benedicto Ramos Suárez aún no ha rebasado el ecuador de la mili (lleva cumplidos siete de 15 meses). pero ya ha sufrido heridas en carne propia como si hubiera ido a la guerra. En realidad, salvo el mes de instrucción en Cádiz, no ha salido de Tenerife, y la mayor parte del servicio militar la ha pasado como marinero de la sección naval de la Cruz Roja.Cuando llegó junto a otro militar, en febrero pasado, a su destino, la Unidad de Voluntarios, Socorro y Emergencia de la Cruz Roja de La Laguna, se tropezó con dos individuos cuarentones, según ha trascendido tras esta denuncia, que tenían por costumbre recibir a los novatos afeitándoles los testículos o marcándoles el trasero con el sello de entrada o salida.
El joven Ramos, de 18 años, apenas ha estudiado hasta séptimo de EGB; trabaja en el bar de un cuñado suyo, y salió aficionado al mar, como su padre, un pescador de los pies a la cabeza.
Su hermana, la denunciante, lamenta que no le hayan devuelto la camiseta con el rostro impreso de Bob Marley que llevaba puesta. "Es la mejor prueba, aunque sé que han intentado quemarla con el motor de un coche para hacer ver que tienen razón".
