Amagar, esquivar, retroceder

Aviones de combate iraquíes tuvieron que regresar en retirada hacia sus bases después de haber sido captados y puestos en su mira por los radares de aeronaves norteamericanas, según informaron ayer oficiales de la Fuerza Aérea de Estados Unidos que forman parte del contingente desplegado en Arabia Saudí."No quieren jugar con nosotros. Si yo volase en un Mirage, y un F-15 me hubiera colocado en su punto de mira, también yo habría escapado lo más rápidamente posible", explicó el jefe de una tripulación a un grupo de periodistas norteamericanos que sigue los movimientos de las tropas de su país en el Golfo.

El comandante del Ala Táctica de Combate número uno de la base de la Fuerza Aérea norteamericana de Langley, en el Estado de Virginia, coronel John McBroom, no quiso confirmar este incidente y se limitó a comentar que tenía instrucciones de no mencionar ningún encuentro con aviones iraquíes.

Superioridad aérea

El coronel McBroom confirmó, sin embargo, que la capacidad aérea norteamericana en la zona es sensiblemente superior a la de Irak y explicó que, aunque las fuerzas de Estados Unidos no empezarán la guerra, sí están capacitadas para resolverla favorable y rápidamente en el aire.

"No estamos aquí para lanzarnos a una guerra", dijo el oficial norteamericano, "estamos aquí para conseguir la paz. No empezaremos una guerra, pero si ésta ocurre en el aire podríamos acabarla rápidamente".

Algunos de los miembros de la tripulación de distintos aviones norteamericanos dieron ejemplos de su superioridad con el relato de varios casos en los que aviones iraquíes tuvieron que huir ante su manifiesta desventaja.

"Durante un rato hemos estado jugando al ratón y al gato con un avión iraquí, pero cuando ellos se dieron cuenta de que nuestros radares lo enfilaban salieron corriendo", contó uno de los aviadores que participó en un vuelo de vigilancia.

El coronel McBroom Informó al grupo de periodistas norteamericanos desplazados junto a las tropas enviadas por Washington que sus unidades de combate presentaron cierta vulnerabilidad en los primeros días, a su llegada a territorio saudí, pero añadió que después, cuando coordinaron sus misiones con los saudíes y cuando recibieron la protección de las fuerzas terrestres de Estados Unidos -sobre todo los poderosos sistemas de misiles tierra-aire Patriotas-, desapareció esa vulnerabilidad.

Los periodistas que visitaron la base aérea saudí en la que se encuentra el ala norteamericana observaron que los aviones de Estados Unidos reciben toda clase de facilidades de sus anfitriones, aunque no fueron autorizados a identificar el lugar en el que se encuentra esa base.