Asegurar el futuro

El alcalde de Estepona, Manuel Sánchez Bracho, del CDS, tiene prisa por amarrar el futuro. El pasado miércoles, representantes del Ayuntamiento y de los promotores inmobiliarios -debidamente autorizados por el obispo de Mallorca- firmaron un preconvenio para la utilización de terrenos. El municipio recibió cien millones de pesetas a cuenta y el compromiso de cesión de la finca Caniquiqui, 80.000 metros cuadrados que se destinarán a recinto deportivo.

En el preacuerdo se fija el destino de 675.000 metros cuadrados de la finca Guadalobón para la sede de la Universidad Pontificia -dependiente de la Conferencia Episcopal-, colegios mayores, un hospital clínico, y un centro ecuménico. En la parte costera se construirá un complejo hotelero, naútico y comercial.

En el terreno de Arroyo Vaquero están previstos un campo de golf de 36 hoyos, hoteles y zona residencial de ocio. En la finca El Ciprés de Hornacinos se proyecta un centro lúdico y comercial. Se dedicarán 80.000 metros cuadrados a polígono industrial.

El PSOE no es el único que critica las prisas del alcalde."Quería hacer público todo esto cuando las elecciones municipales estuvieran cerca", aseguran los concejales socialistas. La maestra más antigua, Mariana Jiménez, está dolida porque nadie la ha avisado del papel que le corresponde en una de las fundaciones. "El Ayuntamiento hace y deshace y nos tiene en la inopia. Una herencia así no es como para que las cosas se hagan en plan compadre", opina.

Mujeres pobres

La publicidad del caso ha hecho interrumpir su retiro espiritual al obispo de Mallorca. Teodoro Ubeda ha difundido un comunicado en el que, entre otras cosas, detalla las pautas de gestión de la herencia dejada por "católicos ejemplares y de gran sensibilidad cultural y social".Uno de los criterios es la consecución del mejor rendimiento económico, en favor de los fines del testamento", que no son otros que la promoción de la cultura católica, sobre todo en Estepona, aclara el prelado.

Teodoro Úbeda explica que la Universidad Pontificia de Salamanca ha aceptado extenderse a la localidad malagueña "en la medida que lo aconsejen las necesidades del alumnado, las exigencias académicas y las posibilidades de financiación".

Según el alcalde Sánchez Bracho, las esteponeras pobres podrán estudiar, según los deseos de Antonia Guerrero, pero también se favorecerá a los varones con pocos recursos. "Crearemos becas para hombres y mujeres. Hay que adaptarse a los tiempos modernos" asegura.

Para el edil, la construcción de la Universidad es la condición sine qua non para modificar el plan de ordenación urbana y autorizar el desarrollo inmobiliario del legado.

Aunque María Catalina Nadal murió en 1978, la herencia ha estado estado dormida durante una década. Las gestiones comenzaron hace aproximadamente dos años, tras la muerte del párroco Sánchez Ariza.