Salen en libertad provisional los guardias civiles presos en Figueres
El juez togado militar de vigilancia penitenciaria de Barcelona, Ricardo Izquierdo, decretó ayer la libertad provisional de los cuatro guardias civiles detenidos los pasados meses de mayo y junio en las provincias de Barcelona y Tarragona por su presunta vinculación con el clandestino Sindicato Unificado de la Guardia Civil (SUGC).El juez castrense mantiene, sin embargo, el auto de procesamiento dictado contra los cuatro agentes por un presunto delito de sedición, ya que el Tribunal Militar Territorial denegó el recurso contra dicho auto presentado por los abogados defensores de los guardias civiles.
José María Baz Bonilla, Pedro Ruiz Fernández, Francisco Rubio Rodríguez y Carlos Fuentes Mendoza abandonaron la prisión militar de Figueres (Gerona) a las 13.00 horas de ayer. En el exterior del recinto penitenciario esperaban las esposas y familiares de los agentes.
A la salida de la prisión, Baz Bonilla, que fue detenido el pasado 22 de mayo en Tarragona y a quien se acusa de ser el secretario general del SUGC, expresó su inquietud por el destino que correrán él y sus compañeros.
Ruiz Fernández fue detenido, al igual que Baz Bonilla, el 22 de mayo en Tarragona. Los arrestos de Francisco Rubio Rodríguez, a quien se acusa de ser el responsable del sindicato clandestino en Barcelona, y de Carlos Fuentes Mendoza se produjeron el 6 de junio, como consecuencia de la documentación que se incautó tras las detenciones de Tarragona. Fuentes Mendoza está acusado de dirigir la organización de guardias civiles en las comarcas barcelonesas del Vallés Occidental y Oriental, limítrofes con la capital catalana.
El reglamento disciplinario de la Guardia Civil, recientemente aprobado por el Gobierno, prevé la expulsión del Instituto a los miembros del sindicato.
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