Los policías que investigan el 'caso Juan Guerra' denuncian que tienen intervenidos sus teléfonos

El jefe del grupo de Policía Judicial adscrito a la Audiencia Provincial de Sevilla, José Antonio Vidal, que investiga el caso Juan Guerra, presentó el jueves ante el juzgado de guardia una denuncia por "presuntas manipulaciones en el teléfono" de sus dependencias del edificio judicial, según confirmó ayer el juez decano de Sevilla, Alfonso Martínez Escribano. La denuncia de escuchas telefónicas fue efectuada después de que un funcionario del citado grupo policial oyese al descolgar el teléfono una voz que decía: "Oye, que el pincho no coge", según explicaron a EL PAÍS fuentes judiciales. Estos medios confirmaron que tras una primera investigación y comprobación del aparato telefónico se han descubierto manipulaciones en la caja de registro de la línea del teléfono que los policías tienen en la sede de los juzgados.

Las sospechas sobre escuchas telefónicas a los policías judiciales comenzaron hace unos 15 días, según relataron ayer fuentes próximas al caso. Estos medios comentaron que uno de los funcionarios de este grupo, quien anteriormente estuvo destinado en la Brigada de Información de la Policía, descubrió en varias ocasiones ciertas anomalías en el funcionamiento del aparato telefónico y lo puso en conocimiento del jefe del grupo.José Antonio Vidal, quien desde el pasado mes de febrero dirige la investigación policial del caso Juan Guerra, presentó la denuncia el mismo día 19, nada más conocer los hechos. Ese día estaba precisamente de guardia el juzgado de Instrucción número 6, cuyo titular, Ángel Márquez Romero, sigue las querellas presentadas contra Juan Guerra por Izquierda Unida y el Partido Andalucista. El Grupo de Policía Judicial se halla dedicado casi exclusivamente a este caso y José Antonio Vidal mantiene a diario conversaciones telefónicas con el juez Márquez.La denuncia de la escucha telefónica ha sido encargada, en reparto ordinario de casos, al juzgado de Instrucción número 7, a cuyo frente se encuentra en la actualidad el juez José Moreno Carrillo, por vacaciones de su titular, Rafael Márquez Romero.

El juzgado número 7 ha iniciado ya una investigación sobre el asunto para esclarecer los hechos. Según fuentes judiciales ya ha sido descubierta una manipulación en la caja de registro del aparato telefónico, y se está realizando un rastreo de toda la línea por técnicos de la compañía Telefónica, según informaron fuentes policiales, que negaron la intervención de este cuerpo en las citadas escuchas.La Junta de Jueces de Sevilla, reunida en la tarde de ayer, acordó por unanimidad remitir un escrito al Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y al Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) en el que solicitan "la adopción de las medidas necesarias en defensa de los órganos jurisdiccionales". En este sentido, el juez decano de Sevilla, Alfonso Martínez Escribano, declaró a este periódico que "estas medidas deben ser importantes, si se confirman los hechos denunciados, para salvaguardar el trabajo de los jueces", aunque recalcó que "en estos primeros momentos hay que ser cautelosos". Los jueces sevillanos recuerdan en su escrito las actividades que últimamente vienen realizando los policías judiciales en colaboración con el juzgado número 6 en el caso Juan Guerra. La nota señala el "pleno apoyo" de los jueces al Grupo de Policía Judicial "para que continúe desempeñando sus labores tan eficaz y brillantemente como viene haciendo desde su creación". Los magistrados muestran su "inquietud e indignación" por la interferencia que tales escuchas suponen "para la labor de los órganos jurisdiccionales".

Martínez Escribano, que ayer comunicó telefónicamente el asunto a los presidentes del Consejo del Poder Judicial, Antonio Hernández Gil, y del Tribunal Superior de Justicia, Andrés Márquez, señaló que estos hechos deben ser aclarados hasta sus últimas consecuencias.