Gorbachov, reelegido lider del PCUS pese a la resistencia del 25% de los delegados
El presidente Mijaíl Gorbachov fue reelegido ayer secretario general del Partido Comunista de la URSS (PCUS) por el 28ºCongreso de¡ Partido. La reelección se ha producido a pesar de la resistencia de gran número de delegados a la concentración de cargos por el máximo dirigente de¡ Estado y de¡ partido y a pesar de la aparición de un imprevisto candidato, el líder minero Teimuraz Avaliani.
Gorbachov obtuvo 3.411 votos a favor y 1.116 en contra de un total de 4.538 votos emitidos, 11 de ellos nulos. Avaliani se quedó con 501 votos, una cifra nada despreciable teniendo dado el carácter simbólico de su candidatura.Esta fue presentada en vísperas de una huelga general de mineros cuya convocatoria para hoy se mantiene pese a los esfuerzos de la dirección soviética.
Avaliani, que tuvo cierto protagonismo en las huelgas de la región siberiana de Kuzbás el pasado verano, fue el único que mantuvo su candidatura entre los siete candidatos propuestos por la sala, además de Gorbachov. La lista incluía al ministro de Exteriores, Edvard Shevardnadze; al miembro del Consejo Presidencial Alexandr YákovIev; al ministro del Interior, Vadim Bakatin, y al segundo secretario de Armenia, Oleg Lovov, que se perfila como un político con futuro y, según medios reformistas, como un eventual número dos del partido.
Avaliani, que hoy pasa por tener posiciones próximas al Frente Unido de los Trabajadores (OFT), una organización obrera marxista, hizo una exposición sencilla de sus ideas y consideró que la educación soviética debe incluir la ideología desde el jardín de infancia. Avaliani es conocido porque en 1978 envió una carta pidiendo a Leonid Breznev que se retirara, un acto que le valió una reprimenda policial.
La huelga de mineros y su posible extensión a otros sectores es uno de los problemas inmediatos para Gorbachov, quien anoche agradeció la confianza depositada en él por el 28º Congreso y consideró que ello era un apoyo a su línea política.
Por la mañana, Gorbachov había pronunciado un discurso que llamó la atención por su dureza hacía los sectores conservadores. Dijo que las raíces de la "crisis del partido" están en no comprender que la sociedad ha cambiado. Lamentó el comportamiento de algunos delegados en el 28º Congreso y recalcó que "el éxito del partido se basa en comprender que vive en otra sociedad". La defensa del mercado libre efectuada por Gorbachov fue radical. De continuar como ahora, llevaremos al país a la bancarrota", manifestó.
Gorbachov fue tajante en la defensa de la política exterior, donde lanzó a bocajarro un argumento que ya había utilizado Shevardnadze en lo que se refiere a Europa del Este. "¿Acaso tenían que ir los carros de combate otra vez?", dijo Gorbachov, que rechazó como "totalmente inaceptables" las objeciones contra la política exterior. Inquirió al auditorio sobre si la URSS procedió correctamente sacando a sus tropas de Afganistán. Si esto se pone en cuestión, dijo, "ya no sé con quién estoy tratando".
Incompetencia
El líder soviético acusó de incompetencia a un partido incapaz de dirigir procesos, pero que pretende ser vanguardia de la sociedad. "Sin una nueva política exterior", dijo, "no estaríamos en condiciones de efectuar una transformación democrática y económica del país".
Por primera vez, se mostró dispuesto a utilizar su poder, y no solo su capacidad de persuasión, al decir que los funcionarios del Estado tienen que mantener posturas de lealtad para con él y para con su Gobierno, sean cuales sean sus posturas personales. Refiriéndose a la pérdida de influencia del partido, Gorbachov señaló: "Se han acabado para siempre los tiempos en los que se podía recibir del Comité Central una especie de mandato para dirigir el distrito, la ciudad, la región y la república y seguir en el puesto hasta expirar al margen de cómo se dirigieran las cosas y de lo que la gente pensara de uno". En alusión a los rumores sobre posibles alianzas entre sectores conservadores contra la perestroika, Gorbachov dijo: "Ninguna dictadura, si es que alguien está cociendo en su cabeza esta idea dañina, resolvería nada".
El discurso de Gorbachov causó una viva impresión en el auditorio y pareció producir alguna confusión entre los sectores radicales que aparentemente se preparaban ayer para hacer una declaración conjunta de salida del PCUS.
"El mayor peligro en la actual etapa de la perestroika lo veo", dijo Gorbachov, "en que permitamos la confrontación entre el partido y la sociedad y, sobre todo, si se dividen las fuerzas democráticas, progresistas, orientadas a una transformacion radical de nuestra sociedad".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.