Solchaga pide que haya ministros en la dirección del PSOE para combatir el "monolítismo"

El ministro de Economía y Hacienda, Carlos Solchaga,abogó ayer por la entrada de ministros en la comisión ejecutiva del PSOE para garantizar "una buena conexión" entre el Gobierno y el órgano de dirección del PSOE y evitar el "monolitismo". Solchaga se mostró dispuesto a formar parte de la ejecutiva tras el próximo congreso que ayer fue convocado por el comité federal para los días 9, 10 y 11 de noviembre. Solchaga, que aportó ayer la principal novedad política de la reunión del federal, se enfrentó con el secretario de organización, Txiki Benegas, al considerar el primero que en el informe de gestión elaborado por la ejecutiva no se resaltaban los logros en materia económica, es decir, de su área gubernamental.

En esta ocasión Solchaga, en contraste de lo que ha venido siendo su actitud de los últimos meses caracterizada por no hablar públicamente de su partido, no tuvo inconveniente en manifestar sus opiniones antes de comenzar la reunión del comité federal.Dentro de esa reunión no había posibilidad reglamentaria de referirse a la composición de una futura comisión ejecutiva por ser una materia propia del congreso. El ministro de Educación, Javier Solana, al ser preguntado por el mismo asunto no quiso referirse a esta cuestión.

Falta de conexión

Solchaga, en un tono sosegado y nunca hablando en nombre propio sino apoyándose en la coletilla "algunos pueden pensar" como preámbulo de sus opiniones, defendió la apertura de la ejecutiva a miembros del Gobierno. Sus palabras fueron las siguientes: "La entrada de ministros podría producirse en el 322 congreso porque nunca está de más garantizar una buena conexión entre Gobierno y ejecutiva. Podría decirse con razón que hasta ahora esa conexión ha existido pero garantizar que pueda existir en el futuro no sería malo".

"Algunos han considerado -continuó Solchaga-, quizá con razón, que la ejecutiva es, en algún sentido, demasiado monolítica y, por tanto, el debate en la dirección socialista está menos enriquecido y diversificado que si la composición fuera distinta. Creo que esa consideración puede ser razonable". Por último, preguntado el ministro si estaría interesado en formar parte de la ejecutiva, manifestó: "Si me lo propusieran, probablemente sí".

En el curso de la reunión, que empezó pasadas las 9.00 de la mañana y no había terminado al cierre de esta primera edición, Solchaga inusualmente tomó la palabra en turno de réplica al informe de gestión defendido por el secretario de organización, Txiki Benegas. El ministro reprochó que en ese informe no se destacara suficientemente la labor económica, es decir, su propia parcela, así como la concertación social. Benegas replicó que estaba suficientemente reflejada. Ambos mostraron, según asistentes a la reunión, buenas dosis de ironía.

Solchaga terminó señalando que "menos mal que el secretario general sí había respetrado y había reconocido la parcela económica", en referencia a la intervención de Felipe González para defender la gestión del partido en los últimos seis meses.

Los miembros de la corriente Izquierda Socialista (IS), Antonio García Santesmases, Manuel de la Rocha, Ignacio Sotelo y Vicent Garcés, provocaron con sus intervenciones respuestas de González y de Benegas. IS quería saber si el PSOE excluía de su política de alianzas a Izquierda Unida (IU). Esto le dio pie a González para señalar que no había necesidad de hablar de ello, toda vez que el PSOE defiende "un proyecto autónomo". No obstante, González afirmó el deseo de que su proyecto tuviera como pilares la política de concertación social y la de acuerdos con fuerzas parlamentarias, aunque si no se lograran esas alianzas "el proyecto debe llevarse a efecto". En este apartado se felicitó por la posición "dialogante" del CDS, CiU y PNV, en tanto que criticó al PP y a IU.

Benegas, también en respuesta a IS, para sorpresa inicial de algunos, señaló que el PSOE sí había mantenido díálogo con los comunistas. "Lo que ocurre es que ese contacto sólo ha sido posible con los que siguen una línea renovadora y reformista y hace ya tiempo que están fuera del PCE", en referencia al grupo liderado por Enrique Curiel, próximo a ingresar en el PSOE.

González tuvo una intervención institucional con continuas referencias al proceso de integración en la Comunidad Europea.