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Tres cuadros de Van Gogh, robados del Museo Noordbrabant, en Holanda

Los lienzos, valorados en 845 millones de pesetas, pertenecen a la primera etapa del pintor

Isabel Ferrer

Tres cuadros del pintor holandés Vincent van Gogh fueron robados en la madrugada del miércoles del Museo Noordbrabant, en la ciudad de Den Bosch, al sur del país. Se trata de La esposa del granjero, Molinos de agua en Gennep y Campesina sentada, pertenecientes al periodo de Nuenen, localidad de los Países Bajos donde el artista residió en 1884-1885. Los lienzos han sido valorados por los expertos en 15 millones de florines (unos 825 millones de pesetas) y fueron sustraídos de la única sala donde no funcionó el doble sistema de alarma instalado por el centro.

Los ladrones forzaron una ventana para entrar y se llevaron las telas en medio del estruendo de las sirenas. La policía acudió cuando no habían pasado ni dos minutos desde que las alarmas sonaran en el silencio de una de las noches más calurosas del año. A pesar de la rapidez con que se desarrollaron los hechos, los agentes de policía no saben aún si se trata de ladrones profesionales. Tras la venta millonaria del lienzo El doctor Gachet y con la antológica en marcha, vender un Van Gogh supone una tarea casi imposible.Este ha sido el primer robo sufrido por el Museo de Noordbrabant, que permanecerá, sin embargo, abierto al público. El centro había adquirido la obra Campesina sentada en 1984. Las otras dos habían sido cedidas por el Servicio Nacional de Artes Plásticas y configuraban la colección completa dedicada al pintor en Den Bosch.

Durante el periodo de Nuenen, Van Gogh decidió retratar la dura vida del campo. Entre enero de 1884 y noviembre de 1885 produjo numerosos estudios y óleos de tejedores. Dos de ellos aparecen, colgados ahora en Amsterdam en la exposición antológica. Dio también clases sobre la técnica del bodegón y realizó por lo menos 50 dibujos de cabezas de campesinos. Pero sobre todo preparó y realizó el cuadro Familia comiendo patatas ( 18 8 5), el primero de los que él consideró lo bastante bueno como para remitírselo a su hermano Theo. Toda la etapa de Nuenen está marcada por los tonos oscuros y las expresiones entre cansadas y ausentes de los granjeros que pintaba.

Poco después de conocerse el robo, los responsables de las salas de Amsterdam y Otterlo dedicados ahora a la conmemoración del centenario del artista, declararon que no modificarán la vigilancia destinada a ambos edificios. Los dos centros reforzaron su personal y medidas de seguridad antes de la inauguración, el pasado 31 de marzo, pero no quieren convertirlos en fortalezas. Precisamente de Otterlo fueron sustraídos en diciembre de 1988 tres lienzos del propio Van Gogh.

Interior con telar y tejedor (1885), Familia comiendo patatas (1885) y Girasoles marchitos (1887) desaparecieron del museo, situado en un parque natural, minutos después de que sus guardianes oyeran el ruido de cristales rotos. En abril de 1989, los ladrones devolvieron el primero de los cuadros, al tiempo que pedían 270 millones de pesetas por los otros dos. En junio de ese mismo año, el abogado de uno de los cuatro detenidos en relación con el caso restituyó el resto del botín. Las dos últimas telas estaban valoradas en 1. 140 millones de pesetas. En mayo de 1988, un Van Gogh, un Cézanne y un Jongkind, valorados en 6.000 millones de pesetas, desaparecieron del Museo de Arte Moderno de Amsterdam. Diez días después la policía los encontró en el hotel Pullman de la ciudad donde dos agentes se hicieron pasar por compradores ante los propios ladrones.

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