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FERIA DE SAN ISIDRO

Los diestros consideran un gran mérito lidiar toros de Pablo Romero

Jose A. Campuzano, Luis Reffia y Curro Duran, cartel de esta tarde

José Antonio Campuzano, Luis Reina y Curro Durán, los tres diestros anunciados para hoy, coinciden en sentirse orgullosos y presumir de lidiar los toros de Pablo Romero, lo que consideran de gran mérito en la actualidad por el mal momento que atraviesa esta ganadería sevillana. Reina y Darán actúan por primera y única vez en la feria, mientras que Campuzano ya tuvo una oportunidad anterior en la misma.

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Reina, nacido en Almendralejo (Badajoz), hace 32 años y con 10 de alternativa, ya toreó una corrida de Pablo Romero en la feria de 1983 sin que los toros le ayudasen. Tampoco se muestra muy optimista en ese sentido para esta tarde: "Es una ganadería de un gran prestigio, pero que no atraviesa su mejor momento. Por eso nos ponen a los modestos con ella. A mí, al menos, ya me ha servido para darme moral, al saber que otros compañeros con mayor experiencia no se atreven, y para entrar en la feria".En 1985 toreó los victorinos, cuando eran casi todos alimañas, no como ahora", dice, y confía en no retirarse sin actuar en alguna ocasión con toros más cómodos: "Como puede verse, mi carrera está llena de facilidades", ironiza, "siempre con lo duro. Y este año, así, sin anestesia ni nada, con un sólo festejo toreado, me echan a los leones de los Pablo Romero".

Reina presume de torear muy bien de salón. "Que no se rían porque no es tan sencillo, y muchos matadores no saben", explica, para finalizar: "Yo era un novillero con mucha clase, pero nunca pude demostrarla después de doctorarme porque he lidiado casi siempre este tipo de corridas". Su ironía la extiende hasta el final: "Igual se equivoca un toro esta tarde, sale noble y la organizo. A mí no me importaría".

También el sevillano Curro Durán, 30 años y ocho de alternativa, afirma que en su fuero interno está orgulloso de lidiar los toros de Pablo Romero, aunque se muestra muy realista: "Qué remedio, no tenía otra posibilidad para estar en la fería". Durán, triunfador máximo del abono en 1984, año en el que se codeó con las figuras, quiere volver a recuperar ese lugar de nuevo.

"Sé que va a ser dificilísimo", reconoce, "porque el tren de la oportunidad no suele pasar dos veces, y ahora, como no tengo cartel, me echan a las corridas duras, con las que no peseo mucha experiencia, pero m:. madurez como persona y como torero, tras la reflexión y descanso profesional de 1989 me ayudará a lograrlo, si me respetan las lesiones".

En la pasada feria de Sevilla ya lidió una corrida de esta ganadería, que salió muy mansa: "Fue un mérito que me valió como excelente preparación para la de esta tarde en Las Ventas".

A José Antonio Campuzano le han encasillado, muy a su pesar, en las corridas duras y no se lamenta: "Esto viene por rachas y hay que aceptarlo. Siempre queda el consuelo de que los buenos aficionados valoran más los éxitos que puedas alcanzar con ellos y tu orgullo y vanidad personal se hincha".

Coincidió con Durán en la mencionada tarde de los pablo romero, con el mérito añadido de que por la mañana lidió una corrida de Míura, también dificilísima: "Todos los toros salieron tan broncos y moruchos que, después de poderles, he llegado a la conclusión de que por malos que sean los de hoy andaré a gorrazos con ellos".

El de espada de Gerena (Sevilla) lleva toreadas hasta la fecha síete corridas, en las que ha cortado tan sólo dos orejas: "Puede parecer poco, pero la mayoría de las tardes ya era un triunfo salir de la plaza entre ovaciones y por tu propio pie".

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