Los obispos afirman que no encabezarán manifestaciones contra la L0GSE

El episcopado alentará a los católicos para que expresen públicamente su disconformidad con la Ley de Ordenación General del Sistema Educativo (LOGSE). Los obispos han asegurado, no obstante, que no encabezarán manifestaciones de protesta contra el proyecto de ley. Esta actitud es similar a la mantenida con respecto a la Ley Orgánica del Derecho a la Educación (LODE): estar en segundo plano. La sociedad "debe acostumbrarse a que la mitra no bendiga acciones", declaró ayer el presidente en funciones de la Comisión Episcopal de Enseñanza, José Manuel Estepa.

"La postura del episcopado ya quedó patente en el documento Católicos en la vida pública, y, es la de alentar a que los cristianos adopten actitudes de presencia activa, participativa y crítica; no vamos a impedir que estén presentes [en las protestas]", afirmó el secretario del episcopado, Agustín García Gasco, que compareció ayer en conferencia de prensa en Madrid junto a Estepa. Hasta el momento, únicamente un sector, la Coordinadora Estatal e Comunidades Cristianas Populares, ha manifestado su discrepancia con las observaciones realizadas por la jerarquía. Los cristianos de base consideran excesivamente crítica la actitud de la jerarquía con respecto a la LOGSE. Los obispos que comparecieron ayer ante los informadores se mostraron cautos en sus declaraciones sobre participa episcopal en actos de protesta, descartando su asistencia. Con ello expresaban lo debatido durante el pasado Jueves por la Comión Permanente de los obispos, reunida en sesión extraordinaria. "No nos metimos en la cocina de las acciones concretas porque hay un riesgo de que parezca que todo lo que se desarrolla crece al dictado de una central que emana consignas [el episcopado]", manifestó Estepa, quien agregó que ésa "no es la guerra" de los obispos. "Hemos evitado, por tanto, pasar a acciones concretas de entidades concretas; no debemos", señaló el presidente en funciones de la Comisión Episcopal de Enseñanza.Estepa aseguró que ningún obispo había participado anteriormente en manifestaciones de estas características, aunque matizó que en Francia sí tomó parte alguno, pero a título personal, durante la polémica ley Savary, hace unos años. Sin embargo, los obispos españoles insistieron en que alentarían actitudes críticas, pero se mantendrían al margen de las movílizaciones callejeras. De acuerdo con lo expresado ayer, los obispos ni siquiera han pensado en denunciar el supuesto incumplimiento de los acuerdos Estado español-Santa Sede ante ninguna instancia competente, hecho que a su juicio se produce.

Contactos con partidos

Los obispos no descartan, sin embargo, contactos con partidos políticos parlamentarios para canalizar el punto de vista episcopal ante la ley. "No sé si ha habido contactos con políticos; sí los ha habido con el equipo ministerial", dijo a este respecto Estepa.No se descarta que haya habido contactos con la derecha una vez que las reuniones con el Ministerio de Educación y Ciencia no han sido todo lo fructíferas que esperaban los obispos. Fuentes del episcopado manifestaron a este diario que el partido socialista, "tal como hizo con el marxismo, debería ahora abandonar su laicismo radical".

"Los obispos estamos en el centro. Si ellos siguen haciendo oídos sordos al peso social de la Iglesia debemos ir al lado contrario al suyo", agregaron las citadas fuentes en referencia a la derecha.

Los obispos que ayer comparecieron ante los informadores se mostraron más cautos. Así, por ejemplo, consideraron positivas algunas modificaciones introducidas en la ley, sobre todo en la exposición de motivos, que luego no tienen, a su juicio, reflejo en el articulado del proyecto.

Las sombras que el episcopado ve en el texto siguen siendo prácticamente las mismas que cuando la Asamblea Plenaría de los obispos redactó una declaración al respecto el pasado mes de febrero: falta de perspectivas para el desarrollo de la personalidad humana, el hecho de que la asignatura de religión y moral católicas no sea fundamental y dificultades para la creación de centros privados.

Por todo ello, los obispos piden la consecución del pacto escolar "no sujeto al vaivén de los cambios políticos", según el documento aprobado por la Comisión Permanente del episcopado. "Desearíamos poder ayudar a todos, llevando al ánimo de los legisladores la necesidad de introducir en el proyecto de ley las enmiendas que nos parecen imprescindibles", se señala en el documento.