Gobierno y sindicatos superan sus diferencias básicas sobre el control de la contratacion

El Gobierno y los sindicatos consiguieron anoche superar prácticamente todas sus discrepancias en la interpretación del pacto sobre control sindical de la contratación, aunque encontraron difilcultades a la hora de plasmar en un texto que quedan afectados todos los contratos que se deben hacer por escrito. Por ello, se volverán a reunir el próximo lunes. Ayer sí cerraron ya que la copia básica que se debe entregar a los representantes de los trabajadores ha de contener todos los datos del contrato, excepto el domicilio, el estado civil y cualquiera que afecte a la intimidad personal.

Algo menos de dos horas necesitaron ayer los ministros de Economía y Trabajo y los dirigentes de UGT y CC OO para alcanzar un principio de acuerdo sobre el borrador de proyecto de ley que desarrollará el control de los contratos. Los negociadores retornaron lo pactado el 31 de enero e hicieron por primera vez una interpretación similar, aunque a lo hora de redactar las modificaciones que se van a introducir en el último texto propuesto por el Gobierno dedicaron más de tres horas para, al final, decidir que se dan un período de reflexión hasta el lunes.El problema ha surgido en cómo recoger en la norma que quedan sujetos a control sindical todos los contratos que se deben hacer por escrito. Aunque todavía pueden surgir complicaciones, el ministro de Trabajo, Luis Martínez Toval, y los dirigentes sindicales Agustín Moreno (CC OO) y Apolinar Rodríguez (UGT) confían en que el lunes quede cerrado. Si es así, sólo quedarían fuera del control sindical los contratos de alta dirección, las relaciones especiales y los contratos indefinidos que no tengan período de prueba ni estén acogidos a algún tipo de subvención.

Un avance importante logrado ayer es el compromiso adquirido en relación al contenido de la copia básica del contrato que debe entregar el empresario a los representantes sindicales. El texto que se incluirá en el articulado del proyecto de ley dice que "con el fin de comprobar la adecuación del contenido del contrato a la legalidad vigente, esta copia básica contendrá todos los datos de] contrato a excepción del DNI, el domicilio, el estado civil y cualquier otro que, de acuerdo con la Ley 1/82 pudiera afectar a la intimidad personal".En consecuencia, la información que conocerán los representantes de los trabajadores incluye el salario, la jornada, la duración del contrato y las cláusulas adicionales.

Salvaguardar la intimidad

Para salvaguardar la intimidad, se va a añadir asimismo en el proyecto de ley un párrafo que dice que "tantos los representantes de la Administración como los de las organizaciones sindicales y de las asociacionnes empresariales que tengan acceso a la copia básica de los contratos en virtud de su pertenencia a los órganos de participación institucional observarán sigilo profesional, no pudiendo utilizar dicha documentación para fines distintos de los que motivaron su conocirniento".Tanto el ministro de Trabajo como los dirigentes de UGT y CC OO coincidieron en afirmar que las dos partes han realizado un ejercicio de responsabilidad, aunque les queda por terminar de concretar el ámbito de la ley y a la colaboración de las centrales con la Inspección de Trabajo.