Serra rompe la tradición y deja el Ejército de Tierra sin el mando de la cúpula militar
El ministro de Defensa, Narcís Serra, sorprendió ayer a los consejos superiores de los ejércitos al comunicarles su decisión de que el nuevo jefe del Esta do Mayor de la Defensa (Jemad) no pertenezca al Ejército de Tierra, al que correspondía el cargo en virtud de una tradición seguida escrupulosamente hasta ahora. El almirante de la flota Gonzalo Martín Granizo es el militar con más posibilidades de encabezar la Junta de Jefes de Estado Mayor.
La decisión de romper con la tradicional rotación de los tres ejércitos en la jefatura de la Junta de Jefes de Estado Mayor (Jujem) desbarató todos los pronósticos, que coincidían en situar al frente de la cúpula militar al capitán general de Madrid, José Rodrigo, o, en su defecto, al de Sevilla, Ramón Porgueres, ambos de Tierra. El ministro de Defensa se reunió por la mañana con los consejos superiores de los tres ejércitos, a los que comunicó su decisión. Por la tarde, recibió en su despacho a los miembros de la Jujem saliente, con quienes perfiló la propuesta que hoy presentará al Consejo de Ministros para su aprobación definitiva.La reunión más dificil fue sin duda la que mantuvo Serra con el Consejo Superior del Ejército de Tierra, dos de cuyos integrantes aspiraban a culminar su carrera en el máximo destino militar. El ministro llegó al Cuartel General del Ejército cuando los ocho tenientes generales llevaban más de cuatro horas reunidos y habían sido puestos en antecedentes por el todavía Jefe del Estado Mayor del Ejército (Jeme), Miguel Íñiguez del Moral. El encuentro, prolongado con una comida, sirvió al ministro para explayarse en unas explicaciones que fueron recibidas con tanta disciplina como contrariedad.
Hombre de confianza
Descartados los generales del Ejército de Tierra, el almirante jefe de la Flota, Gonzalo Martín Granizo, es el militar con más posibilidades de convertirse en el nuevo Jemad; aunque ayer no se descartaba en algunos medios al jefe del gabinete del ministro desde 1986, Ramón Fernández Sequeiros, quien probablemente ocupará la jefatura del Estado Mayor del Ejército del Aire.La adjudicación definitiva del cargo de Jemad condiciona el reparto de los demás puestos de la Jujem, ya que si Martín Granizo accede a la dirección de la cúpula militar, el mando de la Armada podría quedar en manos del segundo jefe de su Estado Mayor, almirante Carlos Vila.
La pérdida de la jefatura de la cúpula militar por parte de Tierra dejará fuera de la Jujem a uno de los dos generales cuya presencia en la misma se daba como segura: Rodrigo o Porgueres. Las fuentes consultadas ayer se inclinaban por el segundo, actual capitán general de Sevilla, como nuevo jefe del Ejército de Tierra.
La decisión de romper con la rotación de los ejércitos al frente de la Jujem, por primera vez desde 1982, la ha tomado Narcís Serra pensando más en la proyección internacional de las Fuerzas Armadas españolas que en sus problemas domésticos.
La candidatura del almirante Martín Granizo viene avalada además por su experiencia de un año como jefe del Estado Mayor Conjunto, en 1987, lo que le garantiza un conocimiento operativo del funcionamiento de los tres ejércitos.
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