Tres coches bomba siembran el terror en las ciudades de Bogotá y Cali
La víspera del Día de la Madre se convirtió en Colombia en una jornada de luto y dolor. Tres coches bomba explotaron en la tarde del sábado (madrugada de ayer en España) dejando un saldo de 24 muertos y más de un centenar de heridos, muchos de ellos de gravedad. Dos de los atentados terroristas ocurrieron en Bogotá, y el otro, en la ciudad de Cali, la tercera en importancia del país. En Medellín, otras 12 personas fueron asesinadas.
"Estos hechos sólo pueden ser actos de gente desalmada", dijo con rabia y dolor una de las víctimas. Se refería al hecho de que los coches bomba fueron colocados en sectores comerciales de Bogotá y Cali que estaban atestados de compradores que querían adquirir un detalle para el Día de la Madre, que se celebró ayer en Colombia. Entre las víctimas hay cinco niños menores de 10 años.Las dos bombas en Bogotá explotaron simultáneamente a primeras horas de la tarde. Una de ellas fue colocada en el sector de Niza, al norte de la capital, y la otra en el popular barrio de Quirigua. Las escenas más desgarradoras se vivieron en este último lugar, donde hubo 10 víctimas. A la hora del atentado cientos de personas se agolpaban en la calle. "Mi pequeña niña quedó completamente destrozada", gritaba con desesperación una joven que trabaja en unos almacenes afectados.
El caos fue total al llegar la noche. Todo el sector quedó sin energía eléctrica y sin comunicaciones telefónicas. A la luz de las velas se continuó la labor de remoción de escombros.
En Cali, el horror se inició a las nueve de la noche. El coche bomba estalló en un sector de bares y discotecas en el céntrico sector de la avenida Quince. Las víctimas fueron ocho y los heridos 39. De ellos hay 10 en estado crítico.
Las autoridades militares y policiales no dudaron en atríbuir los tres actos terroristas a la mafia del narcotráfico. En los últimos ocho meses, 16 coches bomba del narcoterrorismo han estremecido el país.
Entre tanto, en Medellín, los asesinatos de policías no tienen tregua. En los últimos tres días han muerto a manos de sicarios 10 agentes. Igualmente, continúan los asesinatos colectivos en el populoso sector de las comunas orientales, lugar donde viven cien bandas juveniles de sicaríos. En la noche del sábado, 12 personas fueron asesinadas, en dos cafeterías, por desconocidos a bordo de dos automóviles.
Triángulo de la cocaína
Muchos creen que el último ataque de los narcotraficantes es una respuesta a las últimas acciones del Ejército y la Policía. En menos de una semana fue desmontado el llamado triángulo de la cocaína. En plena selva fueron hallados y destruidos varios escondites donde se almacenaba la cocaína salida del país y de Bolivia y Perú.
Pero no se puede descartar que los actos terroristas sean un eslabón más dentro de la serie de hechos de terror con los que la extrema derecha pretende desestabilizar el país e impedir las elecciones presidenciales del próximo 27 de mayo.
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