Una embarazada acusa a los vigilantes de un 'hiper' de tratos vejatorios

María del Carmen Hernández, ex funcionaria embarazada de seis meses, denunció el pasado lunes por la noche a dos guardias jurados de la empresa Punto 5, contratada por el hipermercado Alcampo, por obligarle a desabrocharse en público dejando su tripa al aire después de intimidarla cuando acababa de efectuar su compra. Fuentes de Punto 5 señalaron que los vigilantes se habían limitado a pedirle que enseñara el bolso "y punto".Me han visto intimidades que no tenían por qué ver", explica esta mujer de 34 años, que pronto tendrá su tercer hijo.

La ex funcionaria, que trabajó para el Ministerio del Interior y conoce "los derechos de los ciudadanos", se negó a acompañar a los guardias a un cuartito "sin presencia de testigos". Sin embargo, cuando vio que otros dos agentes se acercaban mientras otros dos la presionaban agarrándola por el brazo tuvo que ceder y desabrocharse la cazadora. "El problema", explica la mujer, "es que, por mi embarazo, llevaba los pantalones desabrochados y sujetos por un imperdible dejando todo al aire".

La mujer, que efectuó su denuncia en la comisaría de Fuencarral, donde dejó la descripción de los dos agentes, manifestó que aunque ella trató de mostrarse educada, los guardias privados la trataron con "recochineo" y la coaccionaron.

Por su parte, el director del hipermercado, añadió que el asunto era responsabilidad de la empresa de seguridad por ellos contratada. Por su parte, vigilantes de Punto 5 dijeron que lo único que sabían "por el momento" es que se había pedido a una señora que enseñara el bolso, "ya que es una norma del centro. Ella lo enseñó de malos modos y se fue".