Industrias, productores y Administración rechazan una cuota comunitaria de azúcar

Las industrias azucareras españolas, los productores de remolacha y la Administración mantienen posiciones coincidentes contrarias a una cuota desde la Comunidad Europea de cara a las próximas reuniones que se deben celebrar en la Comunidad para elaborar un reglamento para este sector que sustituya al actualmente vigente.Las tres partes rechazan toda posibilidad de una cuota comunitaria, sugerida en algunos momentos por grandes firmas de otros países, lo que pondría en riesgo el cultivo de remolacha allí donde fuera menos productiva según los intereses de cada empresa multinacional.

Los agricultores rechazan igualmente esta modificación ante la posibilidad de la entrada y el control de firmas de otros Estados miembros en la industrias españolas.

Actualmente, la producción azucarera en la Comunidad funciona por un sistema de cuotas nacionales. España tiene una producción asignada de un millón de toneladas, cantidad ajustada en su día a las necesidades del consumo interior y que actualmente se halla por debajo de la demanda. Los cultivadores de remolacha, coincidiendo con los movimientos de fuertes paquetes accionariales en estas empresas, mostraron su oposición a la posibilidad de una presencia mayoritaria en las mismas de empresas como British Sugar, General Sucrière o Ferruzzi. Según dirigentes de la cooperativa Acor, ello supondría un riesgo permanente para el sector en el caso de que un día se impusiera una comunitarización de cuotas y la posibilidad de una firma para producir allí donde más conviniera a sus intereses.

Ante las negociciones del nuevo reglamento, el sector remolachero azucarero español va a plantear asimismo un aumento de las cuotas de acuerdo con las necesidades de la demanda, así como la prórroga del período de aproximación de precios hasta 1995 con el fin de no incidir negativamente en los cultivadores españoles.

Según los datos de la industria, España es hoy el único país de la Comunidad Europea donde la cuota azucarera asignada es de una cuantía inferior al consumo interior.

En España., frente a una cuota de un millón de toneladas, el consumo en la última campaña se ha situado en 1.055.000 toneladas, lo que supone un aumento de casi 100.000 toneladas respecto a las cifras del año 1987. En los siete primeros meses de la campaña actual, la demanda se ha incrementado un 9%, especialmente para usos industriales. Por su parte, la demanda de isoglucosa se mantiene congelada en 83.000 toneladas.