El presidente surafricano insiste en la necesidad de acabar con el 'apartheid '

El presidente surafricano, Frederik de Klerk, rechazó ayer, en la reapertura del Parlamento, tras las vacaciones de Semana Santa, la concesión del voto a la mayoría negra, aunque destacó que es necesario acabar con la segregación racial en Suráfrica. Sin embargo, De Klerk no anunció nuevas medidas para eliminar el apartheid, el sistema impuesto hace 42 años para separar a la población de acuerdo con su color.

El presidente de Suráfrica -que hace dos meses puso en libertad, después de 27 de cárcel, al anciano dirigente del Congreso Nacional Africano (ANC), Nelson Mandela,- exigió un "compromiso inequívoco" del ANC de renunciar a la violencia en su lucha contra la minoría blanca.'Ta nueva Suráfrica pertenecerá a toda su gente, ofrecerá una libertad completa, seguridad y prosperidad... y no caerá bajo el dominio de una parte de la población", declaró De Klerk ante las tres cámaras -blanca, India y mestiza- del Parlamento, reunido en sesión plenaria para discutir el presupuesto.

Aunque De Klerk dejó claro que no ve futuro alguno para una país dominado por la segregación, rechazó el sistema de un hombre. un voto. "Creemos que el Gobierno de la mayoría no es viable para un país como Suráfrica porque llevaría a la dominación e incluso a la opresión de las minorías", señaló.

"Estamos convencidos", añadio, "de que compatir el poder en base a la participación de todos, junto a la la protección contra la dominación, es la. única respuesta válida". Pero no especificó cual será el criterio de igualdad para gobernar un país en el que por cada blanco hay cinco negros.

Está previsto que dentro de 15 días se inicien las necociaciones entre el ANC y el Gobierno de Pretoria, con una entrevista entre De Klerk y Mandela.

Por otra parte, la primera ministra británica, Margaret Thatcher, señaló ayer que visitara Suráfrica cuando, lo considere oportuno en respuesta a las furibundas críticas de Nelson Mandela, quien dijo que su presencia en Surafrica sería inapropiada".

El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas aprobó ayer por unanimidad una resolución recomendando a la Asamblea General la admisión de la República de Namibla como miembro 160 de la organización.