Chaves propone una discusión abierta sobre el destino de los beneficios empresariales

"Es posible conseguir aumentos del poder de compra de los salarios compatibles con una desacelaración de los precios y una discusión abierta sobre el destino de los beneficios empresariales". Con estas palabras, el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Manuel Chaves, sentó una de las bases de la segunda fase de la concertación social que se inicia esta semana. Su intervención ante el 35º Congreso Confederal de la UGT terminó con un llamamiento a la coincidencia de objetivos "entre la UGT y un Gobierno socialista"

Durante su participación en la tercera jornada del congreso de UGT, Chaves dijo sentirse emocionado" por los recuerdos que se le reavivaban. "Hoy vengo a hablar como ministro socialista y por encima de las discrepancias y de mis aciertos y errores, los 10 años que he estado en el sindicato son para mí un motivo de orgullo".El tono fraternal de la intervención del ministro fue remachado al final de sus palabras cuando expresó que "la UGT y un Gobierno socialista estamos doblemente comprometidos, por principios ideológicos que nos son comunes, en lograr una sociedad más libre, justa y democrática". Estas palabras, en un congreso que ha reafirmado la autonomía del sindicato frente al PSOE, fueron recibidas por los delegados de UGT con un fuerte aplauso.

Entre medias, el ministro de Trabajo dejó puertas abierta al diálogo social en la nueva fase que se inicia la próxima semana con la entrevista entre el presidente del Gobierno, Felipe González, y los secretarios generales de UGT y CC OO, Nicolás Redondo y Antonio Gutiérrez. Un acuerdo en el que la moderación salarial no será moneda de cambio, sino que "hará posible conseguir aumentos en el poder de compra de los salarios compatibles con una desaceleración en los precios y una discusión sobre los beneficios empresariales".

El pacto de la competitividad tendrá como fines últimos, según Chaves, conseguir un crecimiento económico equilibrado, la creación de empleo y la mejora de las condiciones de vida de los trabajadores. Por ello, se mostró abierto a discutir la Propuesta sindical prioritaria de UGT y CC OO. En cuanto al modelo de diálogo permente, el ministro volvió a ofertar la constitución del Consejo Económico y Social.

Para Chaves, la experiencia de los últimos acuerdos entre el Gobierno y los sindicatos "ha creado un clima de respeto mutuo". Ahora, añadió, "ya no es condición necesaria para avanzar en el diálogo ni el cambio en la política económica del Gobierno, ni la corresponsabilidad de los agentes sociales".

LLamó, por último, a UGT "a revisar ciertas rutinas de la acción sindical, aunque en otras épocas fueron eficaces", ante la nueva situación de recuperación económica y la perspectiva del mercado único europeo en 1993.