Equilibrio necesario
LOS CAMBIOS en el Este de Europa, con la inminente unidad de Alemania, han provocado una lógica concentraclón de las preocupaciones y de la actividad de la Comunidad Europea (CE) hacia esa parte del continente, lo que tiene repercusiones concretas en el terreno de la ayuda financiera. Ello ha provocado en el Tercer Mundo, y especialmente en América Latina, una fuerte inquietud ante la amenaza de que la CE reduzca aún más su atención hacia los gravísimos problemas que aquejan a esa región del mundo. No se trata de temores excesivos. El peligro existe. Y ello obliga a España a desarrollar una labor diplomática intensa para evitar que se acentúe el desequilibrio en la política de ayudas exterio...
res de la Comunidad.Sería absurdo subestimar el papel fundamental que debe ocupar hoy, en el conjunto de la política europea, la evolución del antiguo bloque socialista. Y en ese orden, los pasos que acaban de darse en París para constituir el Banco Europeo para la Reconstrucción y el Desarrollo (BERD) culminan meses de esfuerzos. Los representantes de los 42 países que integran el BERD han aprobado ya las bases de la nueva institución, cuya acta de nacimiento será firmada el 30 de mayo. A partir de una iniciativa de Mitterrand se ha logrado la incorporación de EE UU y de Japón a este nuevo banco cuya misión es, con un capital de 10.000 millones de ECU, ayudar a la recuperación económica de los países de`, Este europeo, incluida la URS S. La CE, que controla el 5 1 % del capital, ha tenido el acierto, ante una cuestión de alcance histórico, de extender a un ámbito mundial -y a la vez de concentrar en un banco europeo- la ayuda a la reconstrucción de los países que avanzan hoy hacia sistemas de libre mercado.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.