Hombre de Fraga, confirmado por Aznar
Las actividades y la personalidad de Rosendo Naseiro, como las de casi todos los hombres encargados de gestionar y captar los fondos de los partidos políticos, aparecen envueltas en la bruma de discreción y oscuridad que levanta el dinero. Fue su éxito en los negocios lo que motivó la llamada en 1986 de su paisano de Villalba Manuel Fraga para que pusiera orden en la contabilidad de Alianza Popular. Precisamente, tras conocerse la detención de Naseiro, el ahora presidente de la Xunta gallega declaraba anoche a la Cadena SER: "Estoy convencido, conociendo al señor Naseiro, un buen emigrante gallego, un hombre trabajador y serio, de que sabrá defenderse ante ajusticia y de que todo lo que se le imputa quedará en nada".
Cuando el fundador del PP regresó a su Galicia natal como presidente de la Xunta, Naseiro permaneció en la sede de la calle de Génova. El sucesor de Fraga, José María Aznar, le confirmó como tesorero hace dos semanas en el congreso del PP, con un rango asimilado al de vicesecretario general y situado bajo su dependencia directa.
Este gallego afincado en Alicante, donde apuntaló su fortuna, siempre mantuvo que no era un político, y que su acercamiento a los asuntos públicos se debió a su estricta lealtad personal a Fraga, único motivo por el que se afilió a AP. "A mi menda", llegó a asegurar, "nunca le van a ver en una lista electoral".
Implicado por Durán
Sin embargo, no pudo evitar verse reflejado en los papeles con motivo de las maniobras en la oscuridad que se dieron en la operación diseñada por el Partido Popular y el CDS para desalojar a Juan Barranco y Joaquín Leguina de la alcaldía de Madrid y del Gobierno de la comunidad autónoma. El intermediario Gustavo Durán le implicó como la persona que le había encargado sobornar al diputado del Partido Regionalista Independiente de Madrid (PRIM) Nicolás Piñeiro, para que cambiara el sentido de su voto e hiciera prosperar la moción de censura presentada contra Joaquín Leguina.Rosendo Naseiro, de 52 años, está separado y tiene una hija de 23 años. Como Fraga, es hijo de caseiros y emigrantes. Nació en Lanzós, parroquia de Villalba, y, estudió bachillerato en esta localidad lucense, al tiempo que aprendía el oficio de tintorero. A los 17 años empezó a trabajar en una tintorería de Ferrol, donde también cargaba carbón en el puerto, lo que le permitió ahorrar y poner su propio negocio en Tui (Pontevedra), donde se casó y, nació su hija.
Pronto vendrían nuevas tintorerías y su incursión en el negocio del transporte por carretera, en el que ya estaba introducida la familia de su mujer, Olga Rodríguez Lorenzo. Actualmente es un importante empresario del transporte con base en Alicante, aunque sus negocios están bastante diversificados en otros sectores, entre ellos el inmobiliario. Amante del golf, posee una buena colección de floreros y bodegones de pintores valencianos del siglo XVIII.
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