Murió Jimena Menéndez-Pidal a los 90 años de edad
Ayer falleció en Madrid, a los 90 años, de una trombosis cerebral, Jimena Menéndez-Pidal, hija del historiador y filólogo español Ramón Menéndez Pidal. Ilustre pedagoga que fundara en 1940 el colegio Estudio, continuador de la Institución Libre de Enseñanza y el Instituto-Escuela, Jimena Menéndez-Pidal, doña Jimena, dirigió este centro durante más de 40 años. Un colegio raro, único español de la posguerra en el que existió la coeducación y en el que se impartían ideas pluralistas poco habituales en la mayoría de las aulas.
A la muerte de Jimena Menéndez-Pidal, cuentan algunos de sus discípulos que en los primeros años de la posguerra, mientras en las calles transitaban las miradas de soslayo temerosas de la denuncia del enemigo, en el colegio Estudio que ella fundó podían convivir en un mismo pupitre la hija de un falangista ajusticiado y el hijo de un republicano fusilado.Pasaron por esas aulas del libre pensamiento, futuros intelectuales y políticos en los que el Estudio quiso engarzar espíritu pluralista, enseñanza liberal y capacidad de diálogo. Los ex ministros José María Maravalí y Luis Gámir, discípulos que repiten su apellido en las aulas: Ortega, Entrecanales, García Obregón...
El Estudio ha sido "un remanso de paz donde se aprendía mediante métodos activos", como comenta una de las fundadoras. Un remanso de paz en el que "Jimena representa un modelo de mujer diferente al ideal de la época. Una mujer trabajadora, independiente, que nos enseñó a razonar y a convencer sin levantar la voz. A respetar al otro", dice Carlota Bustelo, alumna de doña Jimena, hoy subsecretaría de Asuntos Sociales.
Una mujer que combinó la timidez con la fuerza. Que mantenía la disciplina de los escolares sin necesidad de imponer el castigo. "Nos impresionaba cuando nos portábamos mal. Simplemente con entrar en clase, sin una sola palabra, conseguía callarnos a todos", recuerda Carlota Bustelo. "Nunca le pusimos un mote", añade Fernando Salas, abogado y presidente de la Asociación contra la Tortura que fuera su alumno de Historia del Arte. "Se hacía respetar de tal manera", subraya Salas, "que no había forma de meterse con ella".
El recuerdo de Jimena Menéndez-Pidal recorre pasillos y aulas del Estudio. Llegó a ser galardonada por el ministro de Educación Juan Antonio Ortega con la banda de Alfonso X, el Sabio. Y, sin embargo, ella nunca buscó la fama. "Podía haber hecho una vida intelectual y de ciencia filológica que la habrían permitido conseguir la fama, pero prefirió entregar.se a una labor pedagógica", afirma Soledad Ortega Spottorno, presidenta de la Fundación José Ortega y Gasset y directora de la Revista de Occidente.
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