Los sindicatos denuncian la incapacidad del Gobierno para controlar el IPC, mientras la patronal culpa a las centrales

Las fuerzas sociales coincidieron ayer en calificar de muy negativa la subida del 0,6% registrada en el índice de precios al consumo (IPC) del pasado mes de febrero. Mientras las centrales sindicales destacan la incapacidad del Gobierno para controlar la inflación, la patronal CEOE culpó a los sindicatos de hacer imposible la reducción de los precios por sus demandas salariales.Los sindicatos UGT, CC OO y ELA-STV, por el contrario, senalaron en sus comunicados que los incrementos salariales no son la causa de la inflación. UGT afirma que el dato de febrero es "muy negativo" y que confirma "la incapacidad de la política económica del Gobierno para conseguir un cambio real y permanente en la actual tendencia alcista de la inflación".

UGT acusa a los empresarios de pretender reducir los costes salariales para aumentar más su beneficios, aún a costa de generar tensiones inflacionistas. Añade que con esta actitud, "están provocando una situación de bloqueo en la negociación colectiva y, con ello, empujando a los trabajadores a movilizaciones".

El secretario general de CC OO, Antonio Gutiérrez, manifestó ayer "que la evolución de la inflación demuestra que los agentes inflacionistas más importantes no son los salarios". "Los trabajadores y los sindicatos", dijo, "nos vemos asistidos para exigir una política que mejore notablemente el poder adquisitivo, para exigir un cambio de rumbo a tiempo de la política económica y para que, en lugar de degradar el empleo y la inversión productiva, las estimule y, por el contrario, penalice a los que están recalentando la econornía", informa Antonio Yélamo desde Cádiz.

Afectará al empleo

El director del departamento de Economía de la CEOE, José Folgado, coincidió en calificar el dato del IPC de febrero como negativo. "No sirve de excusa", explicó, "el hecho de que prácticamente la revisión de unas determinadas tarifas serían las que justificaran todo este aumento, porque, en definitiva, en otros meses subirán otros bienes o servicios".Amenazó con consecuencias negativas para el empleo, en el caso de que las fuerzas sociales no se comprometan con el objetivo de moderar la inflación, sobre todo "si los sindicatos siguen en la línea de quererlo hacer imposible, demandando unos aumentos salariales totalmente incoherentes con este objetivo, que es absolutamente prioritario".

Por su parte, la oficina de información del Partido Popular destacó ayer en una nota públiea que con los datos de febrero "se demuestra que la inflación continúa sin control y que el Gobierno se muestra incapaz de reducirla". El PP cosidera que las actuaciones en política monetaria deben completarse con otras de índole presupuestaria, fiscal y de rentas.