Venezuela quiere firmar un tratado con España como el de México y Argentina
El Gobierno venezolano aspira a firmar con España un tratado general de amistad y cooperación parecido al que suscribió anteriormente el Gobierno español con los de México y Argentina. Esta actitud supone el reconocimiento de que este tipo de convenios puede ayudar en buena parte a resolver la crisis que afronta.
En su próxima gira por América Latina con motivo de la toma de posesión del presidente electo de Chile, Patricio Aylwin, el presidente del Gobierno español, Felipe González, visitará Caracas del 8 al 10 de marzo, donde firmará una declaración conjunta o carta de intención con el Gobierno venezolano para llevar a cabo el tratado en cuestión.La negociación del tratado general de cooperación, a su vez, tomará unos tres o cuatro meses, dijeron fuentes diplomáticas. En principio, el paquete global incluye sectores económicos, culturales, cooperación científica y técnica, consular y política.
En lo económico, se definirán los créditos comerciales para fomentar las importaciones y exportaciones entre los dos países, excluyendo aportes por parte de España para ayudar a la balanza de pagos de Venezuela. Se trata de créditos comerciales blandos que se complementan con inversiones privadas.
En la apartado de cooperación científica y técnica, España se comprometería a la asistencia Financiera no reembolsable para desarrollar en dos años proyectos de asesoramiento en la modernización de aduanas, la instalación de mercados mayoristas, promoción turística, y entrenamiento de personal y colaboración para la reconversión industrial de Venezuela.
El monto global de lo que se negocia en el tratado de cooperación venezolano-español puede estar cercano a los 4.000 millones de dólares que firmaron México y Argentina. Pero el Gobierno de Carlos Andrés Pérez no se conforma con la negociación de España. En estos momentos se encuentra gestionando, además, convenios similares con Italia, Francia, Japón y Taiwan.
Con el Eximbank -de Tokio- Venezuela aspira a lograr un financiamiento entre 1.000 y 1.500 millones de dólares para destinarlo a la balanza de pagos, a los créditos comerciales y a la cooperación técnica no reembolsable. Con Italia, Francia y Taiwan las aspiraciones en cuanto a monto y término del mecanismo de cooperación bilateral son bastante similares.
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