_
_
_
_

Ensidesa vende a bajo precio una finca rústica de Sevilla a un hermano de Alfonso Guerra

La Empresa Nacional Siderúrgica (Ensidesa), participada al 100% por el Instituto Nacional de Industria (INI), vendió durante 1989 a Juan Guerra González, hermano y ex secretario particular en Andalucía del vicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra, una finca de 52 hectáreas situada en Las Pajanosas (Sevilla) por un importe de 26 millones de pesetas, cuando en realidad estaba valorada en 52 millones de pesetas, según un peritaje realizado en 1980 por una agencia de la propiedad. La información fue confirmada anoche a EL PAÍS por un portavoz oficial de la empresa siderúrgica.

La finca, denominada La Carrascosa, dista unos 500 metros de una urbanización llamada Golf Las Pajanosas -compuesta por núcleos de chalés- y los terrenos están calificados urbanísticamente, en la actualidad, como rústicos. Las negociaciones para la venta de la finca se llevaron a cabo en Madrid y en las mismas intervinieron el propio Juan Guerra y Francisco Lorente, jefe del departamento de gestión de la oficina de Ensidesa en Madrid.José Luis Poyal Costa, portavoz de Ensidesa, confirmó la venta de la finca a Juan Guerra; dijo que la operación fue aprobada por el consejo de administración de la empresa, y que su oferta fue considerada como la "más ventajosa". Poyal añadió que había otro comprador que ofreció por los terrenos 15 millones de pesetas. Sobre los motivos por los que Ensidesa vendió La Carrascosa a menor precio del peritado por la agencia de la propiedad, el portavoz manifestó que en dichos terrenos vive una arredantario "que desvalorizó el precio".

La Carrascosa pasó en 1980 a ser propiedad de Ensidesa como parte del pago de la deuda contraida por la empresa sevillana Hierros y Aceros Especiales -ya desaparecida y cuyo director general era entonces Manuel García Rama- con la empresa nacional de siderurgia. El importe global de la deuda ascendía a 70 millones de pesetas. Los terrenos fueron valorados por una agencia de la propiedad en 52 millones de pesetas. Parte de la deuda fue abonada mediante el traspaso de la finca y el resto, con otros procedimientos financieros.

El alcalde de Guillena, Justo Padilla (IU), a cuyo término pertenece la pedanía de Las Pajanosas, dijo que no había recibido ninguna petición solicitando la recalificación urbanística 'de los terrenos "y si la recibiéramos", precisó, "no la concederíamos, porque en Guillena hay 3.500 hectáreas calificadas y no se ha acometido ninguna actuación todavía". Padilla informó de que la finca La Carrascosa carece de agua, si bien pasa por ella una conducción de agua de Emasesa (Empresa Municipal de Aguas y Saneamiento de Sevilla), que abastece a la capital andaluza.

Juan Guerra, ex empleado de una empresa editorial dedicada a la venta de libros a domicilio, ha sido durante los últimos años y hasta hace unos meses el secretario particular del vicepresidente del Gobierno en Andalucía. Para su función, disponía de un despacho oficial en la sede de la delegación del Gobierno en Sevilla. Este despacho fue cerrado recientemente después de que algunos medios revelaran escándalos relacionados con posibles operaciones de tráfico de influencia, lo que, según el alcalde de Barbate, Serafín Núñez, ha provocado un distanciamiento entre ambos hermanos. Desde antes del verano Juan Guerra no acompaña ya a su hermano en ningún desplazamiento, ni oficial ni personal, por Sevilla.

Precisamente el alcalde de Barbate, Serafín Núñez, confesó ayer a este periódico que Juan Guerra actuó como intermediario de la sociedad mercantil Puerto Zahara, SA, en la firma de un protocolo de intenciones con su Ayuntamiento para la construcción de un proyecto turístico en Zahara de los Atunes. Este proyecto, que alcanza una inversión de 8.000 millones de pesetas, estuvo paralizado durante dos años y medio, según denunció el CDS, y quedó desbloqueado tras la intervención de Juan Guerra, y su posterior aprobación en el pleno municipal celebrado el pasado día 30 de diciembre.

La intervención de Juan Guerra fue reconocida de nuevo ayer por Núñez, quién señaló: "Me llamó en septiembre de 1989 para decirme que recibiera a unas personas interesadas en invertir en Zahara". El alcalde explicó: "En mi conversación le indiqué que ya se habían interesado otras dos sociedades en dicho proyecto, pero que por falta de adecuación al plan urbanístico municipal, dichos proyectos habían sido rechazados". "Juan Guerra", continuó el alcalde, "me dijo que esa gente era respetuosa con la legalidad y con el equilibrio ecológico y que no habría problemas en ese sentido".

Núñez recibió ayer una llamada de Juan Guerra interesándose por la dimensión que habían tomado los acontecimientos, tras las denuncias de tráfico de influencias recogidas en algunos medios. "Me ha preguntado como estaba y porque estaban saliendo tantas declaraciones", añadió. "Juan Guerra", dijo, "me ha desmentido su relación como integrante de la sociedad que promocionará la urbanización turística".

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_