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El Banco de España suspende la inscripción de Alfredo Sáenz como copresidente del BBV

Andreu Missé

El Banco de España dictó ayer una resolución por la que acordó suspender el trámite de calificación e inscripción de las solicitudes de inscripción en el Registro Oficial de Altos Cargos de la Banca de Alfredo Sáenz Abad y José Antonio Sáenz de Azcúnaga, como copresidente y consejero delegado, respectivamente, del Banco Bilbao Vizcaya (BBV), según fuentes próximas a la entidad. Las autoridades monetarias sustentan su decisión en que la inscripción en el Registro Oficial de Altos Cargos de la Banca era un requisito previo a la inscripción en el Registro Mercantil, condición que no se cumplimentó. Ello supone que en este momento el único presidente oficial del banco es José Angel Sánchez Asiaín.

La resolución que ha adoptado el Banco de España está firmada por el secretario de esta entidad y fue comunicada ayer al presidente del Banco Bilbao Vizcaya (BBV).La inscripción de Alfredo Sáenz (en sustitución del copresidente Pedro Toledo, fallecido a mediados de diciembre en EE UU) y José Antonio Sáenz de Azcúnaga en el Registro Mercantil de Bilbao se practicó el pasado 19 de diciembre.

La inscripción había sido acordada por los consejeros procedentes del antiguo Banco de Vizcaya en una reunión en la que actuaron como presidente Angel Galíndez y como secretario José Luis Segimón. Estos consejeros apoyaron su decisión en las bases de fusión del Banco de Bilbao y Banco de Vizcaya, que establecen la presidencia plural durante cuatro años, y en el estatuto del consejero, que señala que durante este periodo transitorio las bajas del consejo de administración se cubrirán, en cada caso, por acuerdo de los antiguos consejos a los que pertenecieran los cargos que hay que sustituir.

El acuerdo de los nombramientos adoptado por los consejeros procedentes del antigo Vizcaya fue impugnado por los consejeros del antiguo Bilbao, encabezados por José Ángel Sánchez Asiaín, mediante la interposición de un recurso de nulidad ante el Juzgado de Primera Instancia de Bilbao.

La decisión de las autoridades monetarias puede suponer un duro golpe para la estrategia de los hombres del Vizcaya, que intentan mantener la misma representación y, presencia en el consejo que en la época de Pedro Toledo.

Demanda de nulidad

En relación con esta demanda de nulidad, la resolución del Banco de España señala que la suspensión de las solicitudes de inscripción en el Registro Oficial de Altos Cargos de la Banca, que fue presentada el 20 de diciembre -es decir un día después de la practicada en el Registro Mercantil- se mantendrá "hasta que por sentencia firme se decida sobre la validez de los acuerdos adoptados o hasta que por el consejo del Banco se adopten estos acuerdos conforme a los Estatutos de la entidad".

La resolución de la autoridad monetaria se apoya en el decreto de 26 de abril de 1969, sobre incompatibilidades de altos cargos de los Bancos privados y en la orden de 22 de mayo del mismo año que regula el funcionamiento del registro.

El artículo 12 del decreto establece: "Se crea en el Banco de España el Registro Oficial de Altos Cargos de la Banca, en el que necesariamente habrán de figurar inscritas, antes de la inscripción de sus nombramientos en el Registro Mercantil, las personalidades elegidas o designadas para desempeñar en la banca privada y en el Banco Exterior de España los cargos de presidente, vicepresidente, consejero o administrador, director general y asimilados".

Por su parte, la orden posterior señala en sus artículo 62: "Las entidades bancarias privadas y el Banco Exterior de España, deberán bajo su responsabilidad abstenerse de dar posesión en su cargo a cualquier persona que deba figurar en el Registro Oficial de Altos Cargos, en tanto no tengan conocimiento oficial de su inscripción en el mismo".

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