Entran en vigor en Polonia duras medidas de austeridad

Fuertes subidas de precios de combustibles y energía acompañaron la entrada de Polonia en el camino hacia el saneamiento económico pretendido por el Gobierno de Tadeusz Mazowiecki, el primero que se formó en la Europa del Este no dominado por el partido comunista.

La población parecía ayer aterrada por la creciente carestía, pero al mismo tiempo resignada a asumir los costes de la creación de un sistema económico parecido al occidental. La apertura hacia Occidente se verá facilitada por la implantación, el pasado 1 de enero, de la convertibilidad de la moneda nacional (zloti) que, tras sus sucesivas devaluaciones, tiene, por primera vez, desde hace casi medio siglo, la misma cotización oficial y en la calle.

El artífice del programa de saneamiento económico, el viceprimer ministro Leszek Balcerowicz, quien compareció ante las cámaras de televisión para explicar a los polacos el sentido de los sacrificios que les tocará sufrir en los próximos meses, no ocultó que la estabilización de la economía, aquejada por la hiperinflación que en el año 1989 alcanzó un 900%, tendrá que pasar por la fuerte reducción de la demanda. En este sentido las subidas de precios previstas para el primer semestre del presente año no serán en la práctica compensadas con aumentos salariales.

Inflación del 100%

La tasa de inflación, según el Gobierno, será en el año 1990 de un 100%, pero las subidas de precios se acumularán en los primeros meses del año, periodo crucial para el éxito de la revolución económica polaca. El pasado 1 de enero, el precio del carbón, fundamento de toda la economía nacional, subió el 400% en la venta al por mayor y en el 600% en venta al público. La energía eléctrica cuesta casi cuatro veces más que el año pasado y el gas casi tres veces más. En un 100% subió también la gasolina. Tras esta última subida, el polaco medio podrá comprar con todo su sueldo mensual unos 200 litros de este combustible. Además, los transportes públicos subirán otro 100%.

No cabe duda de que las mencionadas medidas harán aumentar los demás precios, pero el Gobierno asegura que en el segundo semestre del año el Indice de Precios al Consumo se reducirá a tan sólo al 1% mensual. Las tiendas de Varsovia estaban ayer como arrasadas por un huracán, en el que se había convertido el pánico que cundió en el mercado de los comestibles en los últimos días del pasado año.