Sí hubo artesanos
Cuando, el 12 de noviembre, el señor Bocanegra -concejal de Seguridad- afirma en este periódico que los artesanos no hicieronPasa a la página siguiente
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acto de presencia este sábado, los artesanos damos fe de que los que no acudieron de veras fueron el concejal y los reporteros gráficos de este diario, a tenor de la información que aquí aparece.
Nos entristece pensar en la forma en que redactan algunas de sus informaciones... ¿Acaso pasó la época del periodista que llega al lugar de los hechos con su libreta a tomar nota de lo que ocurre? Tememos que con tanta modernez tiren ustedes de teléfonos y de teletipos y ni siquiera se paren a contrastar lo que ahí aparece por si pudiera ser falso o estar manipulado, y además adornan la incierta noticia con la puntilla de la detención de dos supuestos traficantes de los que -qué curioso- no se podía precisar ni la marca de la droga ni la cantidad que portaban.
Muchos somos los que cada sábado, desde hace unos cuantos, en la plaza de Santa Ana, en un espacio que no supera el kilómetro cuadrado, sufrimos, a pie o en automóvil, la presencia de más de 70 policías municipales que por la fuerza de la coacción y argumentando absurdas órdenes impiden la libre circulación a los ciudadanos.
En esta improvisada aduana se ceban especialmente con las obras de artesanía, aunque el otro día un señor no pudo acceder a su casa con una lavadora que acababa de comprar; de la artesanía dicen que son "objetos contundentes" y susceptibles de ser arrojados. Señores, los artesanos -como su propio nombre indica- ni vendemos droga ni hacemos nuestras artesanías para arrojárselas a nadie (ni siquiera los rompecabezas). Y por muchas aduanas y controles que pongan, existe algo de lo que no podrán desposeemos: la razón, que es además nuestro objeto más contundente.
No podrán impedir que los artesanos accedamos con ella a la plaza de Santa Ana cada sábado de seis de la tarde a diez de la noche.- Coordinadora de Artesanos de la Plaza de Santa Ana.
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