La oposición checoslovaca rechaza el primer Gobierno abierto a los no comunistas

ENVIADA ESPECIALEl primer ministro checoslovaco, Ladislav Adamec, hizo ayer público el nuevo Gobierno resultante de la crisis que ha derribado a la anterior cúpula comunista del país. Un Gobierno en el que, a pesar de las promesas de coalición, 15 de los 20 cargos corresponden a comunistas. Sólo un socialista, un popular y tres sin partido han entrado en el nuevo Gabinete. El Foro Cívico rechazó tajantemente al decepcionante Gabinete y anunció que convocará una nueva huelga general para el lunes, día 11, si Adamec no cambia en una semana el Gobierno.

"Los ciudadanos no se dejarán engañar por cambios cosméticos", manifestó un portavoz del Foro Cívico. El grupo opositor mantiene la convocatoria de manifestación para hoy a las cuatro de la tarde, como forma de demostrar a la dirección comunista que el pueblo no permitirá ningún desvío en el proceso hacia la democracia. Los opositores, además, han solicitado la convocatoria de elecciones para antes de julio de 1990, la dimisión del presidente Gustav Husak antes del próximo domingo y nuevos nombramientos en el Gobierno. Husak manifestó ayer que no se empeñará en permanecer en el poder ya que "cumplirá 77 años en enero próximo".El nuevo Gobierno mantiene a 13 de los anteriores ministros comunistas. Entre ellos hay titulares de ministerios decisivos como Exteriores, Combustible y Energía, Agricultura y Nutrición, Transporte y Comunicaciones, éstos últimos vitales ante la crisis económica que atraviesa el país. En el Ministerio de Defensa, el general Miroslav Vacek, jefe del Estado Mayor, sustituye a Milan Vaclavik, y en Interior, Frantisek Pinc a Frantisek Kincl, todos ellos comunistas.

Son precisamente estos cargos los más criticados por el Foro Cívico: "Johanes [ministro de Exteriores] ya fracasó, mentía en todos los foros internacionales, Krumnikl [Combustible y Energía] no puede aportar nada nuevo. Ya conocemos su política de agotar las materias primas. No son competentes y ya los conocemos desde hace mucho", manifestó el portavoz.

Decepción

Los nuevos ministros no comunistas ocupan, para decepción del pueblo después de tantas expectativas, carteras secundarias como la de Precios (Ladislav Dvorak, del Partido Socialista), Desarrollo, Tecnología y Medio Ambiente (Frantisek Reichl, del Partido Popular). Los tres sin partido son: Josef Hromadka, teólogo ecumenista, concesión de la dirección comunista a la enorme religiosidad del pueblo checolosvaco, y que será uno de los cinco viceprimeros ministros; Svetoslava Korinkova, única mujer del nuevo Gabinete y primera en muchos años, nueva ministra de Control Popular; y Viliam Roth, ministro sin cartera.

La decepción se debe también a la ausencia de los prometidos técnicos y economistas que inicien la salida de la crisis con medidas más avanzadas que hasta ahora. Algo a lo que estaban dispuestos expertos como Valtr Komarek, director del Instituto de Pronósticos y uno de los comunistas más populares, junto a todo su equipo. "No se ha tomado en consideración a los sin partido. ¿Dónde están los expertos prometidos? No ha habido cambios en lo más esencial", manifestó el portavoz del Foro.

El nuevo Gobierno, que ayer prestó juramento ante el aún presidente de la República, Gustav Husak, efectuó una condena de la invasión de Praga por parte de cinco países del Pacto de Varsovia en agosto de 1968, que calificó de "violación de las relaciones entre países soberanos". Adamec, el más fortalecido por la crisis comunista, recibió ayer el encargo de iniciar negociaciones con el Gobierno soviético de cara a la retirada de sus tropas.

El Foro Cívico ha manifestado que se disolverá tras iniciarse el proceso al pluralismo. Sus portavoces, como Vaclav Havel, dramaturgo, o Vaclav Maly, sacerdote, han declarado su deseo de reintegrarse a sus profesiones. "El Foro debe durar sólo lo necesario", dijo Havel.