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Industria logra el compromiso de la SIV para instalar una planta de vidrio en El Ferrol

Miguel Ángel Noceda

El Ministerio de Industria y la Societá Italiana del Vetro (SIV) han llegado a un acuerdo por el que esta empresa, definitivamente, se compromete a construir la planta de elaboración de vidrio plano en la ría de El Ferrol. El proyecto, que fue aparcado tras producirse un extracoste sobre el presupuesto inicial, supondrá unas inversiones de 17.500 millones de pesetas -alrededor de 1.500 millones por encima de la cifra inicialmente prevista-, de los que la Administración aportará en torno al 60% en subvenciones y que tendrá ratificar el EFIM, propietario de la SIV.

El acuerdo ibe firmado el pasado viernes en Roma por el presidente de la SIV, Gianlorenzo Saporitti, y los representantes del Ministerio de Industria español, Ramón Pérez-Simarro y José Alejandro Pina Barrio. Durante toda la semana las dos partes estuvieron negociando los flecos para adoptar la definitiva decisión, para la que Saporitti, según su empresa, contaba con todas las bendiciones de sus accionistas, el Ente para la Financiación de la Industria Manufacturcra (EFIM).La consecución de este acuerdo, que deberá ser ratificado, no obstante, por el consejo de administración de la SIV el próximo jueves y la próxima semana por el del EFIM -también lo deberá hacer la Comisión Delegada-, ha ocupado gran parte de los últimos siete meses al departamento de Claudio Aranzadi, que lo había presentado afinales de octubre del pasado año.

Entonces, Francesco Maria Landeschi, a la sazón presidente de la firrna italiana, anunció unas inversiones de 16.064 millones de pesetas, de las que el Gobierno espafflol se comprometía a subvencionar 9.413 millones (el 58,6% del total), y a crear 379 puestos de trabajo. Posteriormente, y tras encontrarse una fdla en los terrenos cedidos por Astilleros y Talleres del Noroeste (Astano) para su implantación, las inversiones sufrieron un aumento de 2.412 millones de pesetas. Asimismo, la plantilla se elevaba en unas cuarenta personas más.

Menos extracoste

Esta novedad en los planes, y el cambio ulterior de presidente de la SIV, condujo a que se pusiera en cuestión la realización de la Fábrica de vidrio. La ubicación escogida para dicha planta, una de las más sacrificadas por la reconversión del sector naval, había levantado muchas expectativas en la zona. Por eso, su paralización produjo un profundo desencanto que llevó al ministerio a echar el resto en la operación.El equipo de Claudio Aranzadi, de esta forma, lograría que la planta se quede en la comarca ferrolana -en concreto, en el ayuntamiento de Fene-, aunque eso suponga elevar las subvenciones totales a algo más del 60% de los 17.500 millones de pesetas en que se cifran la.s inversiones.

Tras el acuerdo, que se produce a las puertas de las elecciones gallegas, el proyecto ha sufrido ligeras modificaciones que hacen que los extracostes se rediazcan a unos 1.500 millones de pesetas y que Industria asuma una gran parte de los mismos, lo que explica el aumento de las subvenciones totales. El recorte se debe a una ligera reducción de la superficie prevista para el proyecto inicial, que ha desplazado la carretera adyacente y suprime el relleno de mar.

El proyecto, no obstante, no tendrá modificaciones sustanciales sobre los planes previstos, aunque el empleo se mantendrá en los 379 trabajadores anunciados. Del total, ya hay contratadas 286 personas y, de ellas, 249 pertenecen a los Fondos de Promoción de Empleo (FPE) procedentes de la reconversión. Falta aún cerca de un centenar que, en su mayor parte, provendrán de esos fondos, donde todavía quedan por colocar en tomo a 400 personas.

La planta constará de un hornofloat (sistema de flotado de vidrio sobre una lámina de zinc para hacerlo plano) y de una unidad de transformación. La capacidad de producción será entre 130.000 y 150.000 toneladas /año y 500.000 metros cuadrados de laminado.

Su construcción comenzará en el momento en que los responsables de la empresa, denominada SIV Atlántica, reciban los permisos y adjudiquen las obras. Según las estimaciones de la empresa gallega, de cumplirse las previsiones, todo puede empezar en diciembre.

Enfrentamientos

La construcción de la planta de El Ferrol provocó un largo enfrentamiento en el seno del EFIM, cuyo consejo de administración decidió, el pasado mes de octubre, aplazar un mes la decisión con el fin de no tomarla antes de las elecciones generales españolas. Además de no querer inmiscuirse en ese proceso electoral, las autoridades italianas razonaron que querían hacer un nuevo análisis. Se habló, incluso, de trasladar el proyecto a Sagunto, donde cuenta con la filial SIV Española (Sivesa).Dentro del EFIM, el socialista Gaetano Mancini, vicepresidente del organismo, era el más firme opositor al proyecto, mientras apoyaba otro en el sur de Italia. Por el contrario, Sergio Castellari, siempre lo defendió. Después de esos enfrentamientos intestinos, se decidió dar carta blanca a Saporitti, que hace dos semanas se trasladó a Madrid. A partir de ahí se aceleraron las negociaciones que concluyeron el viernes.

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Sobre la firma

Miguel Ángel Noceda
Corresponsal económico de EL PAÍS, en el que cumple ya 32 años y fue redactor-jefe de Economía durante 13. Es autor de los libros Radiografía del Empresariado Español y La Economía de la Democracia, este junto a los exministros Solchaga, Solbes y De Guindos. Recibió el premio de Periodismo Económico de la Asociación de Periodistas Europeos.

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