El bloqueo político en Grecia presagia nuevas elecciones

ENVIADO ESPECIAL El presidente griego, Christos Sartzetakis, se dispone a iniciar hoy las consultas que permitan la formación de un Gabinete, tras las elecciones del domingo, que, como el 18 de junio último, no arrojaron un resultado claro que permita a ningún partido gobernar en solitario. A Constantino Mitsotakis, líder de] partido conservador Nueva Democracia, le faltaron tres escaños para alcanzar la mayoría absoluta. El bloqueo político causado por unos comicios que no han resuelto nada arroja una sombra de inestabilidad, que a corto plazo puede conducir a nuevas elecciones,

Con la práctica totalidad de los votos escrutada, Nueva Democracia cuenta con el 46,20% y 148 escaños, a tres de la mayoría absoluta (44,3% y 145 en junio), frente al 40,67% y 128 diputados del socialista PASOK (39,1% y 125) y el 10,96% y 21 parlamentarios de la Coalición de Fuerzas de Izquierda y de Progreso, dominada por los comunistas (13,1 %, y 28). La Cámara se completa con un diputado de la minoría musulmana de Tracia (como en junio), otro de la lista ecologista (los verdes meten un pie en el Parlamento) y, un independiente próximo al PASOK.Nueva Democracia roza otra vez el poder. Mitsotakis ha anunciado que propondrá al presidente- que le permita presentar su Gobierno ante la Cámara para que los diversos partidos "asuman sus responsabilidades". No lo tiene fácil. La unión de las fuerzas de la izquierda impediría su investidura o podría derribarle de un plumazo. Una ley electoral que, caso único en el mundo, parece favorecer al segundo partido le quita al líder conservador la miel de los labios, y su protesta suena vana cuando se recuerda que él mismo votó el pasado marzo por el cambio de legislación que ahora condena.

En teoría, pues, la izquierda podría gobernar. Sólo tiene que unirse. Pero no será fácil. Durante tres meses, la alianza comunista se alió con la derecha. para hacer efectiva la catharsis (depuración) y enviar ante los jueces al líder socialista, Andreas Papandreu, y varios de sus ministros. Motivo: sus supuestas responsabilidades en numerosos escándalos de la Administración del PASOK.

Castigo a los comunistas

Los votantes han castigado a los comunistas por este pacto antinatura y les han quitado parte de la fuerza negociadora a que les hace acreedor su papel de árbitros. Más complicado aún, han dado un voto de confianza a Papandreu, al que absuelven moralmente. Es como si le dieran la razón. Él siempre dijo que el Parlamento no quería hacer justicia, sino venganza.

El PASOK llama abiertamente a la cooperación con los comunistas. Éstos, de momento, se lo piensan y dicen que todo dependerá del programa y de las personas. Lo primero puede arreglarse. Lo segundo es otro cantar. ¿Cómo colaborar con un dirigente al que se quiere mandar a la cárcel? Papandreu es el obstáculo. Pero ya se esboza una solución, y tiene un nombre: Apostolos Lazaris, ex miembro del partido socialista, cuyo programa económico redactó en 1981, huido cuando el olor de la basura descubierta bajo la alfombra del PAS0K se hizo insoportable, colaborador de la alianza comunista en los comicios de junio y, el pasado domingo, diputado electo como independiente en la isla de Lefkada.

Si Lazaris, un hombre al que todos, respetan, se convirtiera en el próximo primer ministro, tal vez Papandreu podría seguir en la presidencia del PASOK y la coalición de izquierdas sería un hecho. Pero, de momento, esta posibilidad es sobre todo una especulación de medios políticos y periodísticos.

Algo hay cierto. Que los griegos están cansados de votar tanto. Y no hay que olvidar que, aunque se supere el actual bloqueo, aparece otra amenaza en el horizonte cercano. El próximo mes de marzo, el Parlamento debe elegir nuevo presidente de la República y, en la tercera votación, 120 diputados pueden bloquear, el proceso y forzar la disolución de la Cámara. Tanto Nueva Democracia como el PASOK tiene esta fuerza. Si a uno de ellos le interesa, tal vez los griegos batan un récord y acudan a las urnas por tercera vez en medio de un año.