El partido comunista polaco pospone su autoinmolación

Ante la resistencia del sector más conservador del Comité Central del Partido Obrero Unificado de Polonia (POUP, comunista), reunido ayer en Varsovia, la dirección del partido se abstuvo de someter a la votación una declaración en la que se anunciaba la autoinmolación de los comunistas. El proyecto, en el que se insiste en la creación del nuevo partido de izquierda que respetará las reglas democráticas, será, sin embargo, sometido al juicio de la base partidista, que decidirá antes del congreso (27 de enero).

La dirección intenta evitar la partición del partido, al menos hasta el congreso. En la declaración programática preparada para éste, el POUP reconoce que sus "fuerzas y la posibilidad de recuperar el crédito social están agotadas", y se muestra partidario de "crear un nuevo partido" sobre la base de la tradición del "pensamiento socialista polaco", así como la experiencia de las corrientes reformistas dentro del partido.El POUP declara asimismo rechazar Ios dogmas", entre ellos la dictadura del proletariado, "el colectivismo, entendido primitivamente, y la falta del respeto a las libertades individuales y los derechos del hombre".

En su documento, los comunistas polacos aluden también a la doctrina Breznev al condenar Ia práctica de limitar la soberanía en aras de un internacionalismo falsamente entendido". En el área económica, el F'OUP se declara favorable a poner fin a la política, de subordinar la economía a los dogmas ideológicos, política que practicó en el Gobierno durante los últimos 40 años, si bien deja claro que estará en contra de la reprivatización masiva de la industria y el desempleo, medidas que anuncia el Gobierno de Tadeusz Mazowiecki. La retórica de la declaración refleja la desesperación de la actual dirección de este partido.