Mañana o tarde
No hace mucho leí un anuncio en el periódico en el que pedían un camarero. Fui buscando trabajo, y ésta fue la conversación sobre condiciones. El horario: bueno, puede escoger entre el de mañana y el de tarde. ¿El de la mañana? Bien, pues empieza a las nueve, sale a las cuatro, entra a las seis y hasta el cierre; bueno, si hay clientela hay que atenderla y las dos horas se pueden acortar. ¿Y el de tarde? Bueno, empieza a las once y sale al cierre. ¿Y a qué hora se cierra? Pues sobre la una o una y media de la madrugada, depende de la clientela. ¿Y días libres? No, no; días libres, nada, hay que aprovechar el verano. Cualquier camarero trabaja 15 o 16 horas diarias sin derecho a protestar, porque en tal caso te quedas sin trabajo, y como todo el mundo lo hace, no te queda más remedio que caer en la rueda.-
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.