CiU se opone a fomentar el presidencialismo de los alcaldes

El portavoz adjunto de Minoría Catalana en el Congreso y número uno por la circunscripción de Lérida, Josep Antoni Duran Lleida, manifestó ayer que la única interpretación democrática de unas elecciones municipales, si no hay una fuerza política que obtenga mayoría absoluta, "es el pacto y el consenso". "Los ciudadanos han pedido pacto y diálogo y no es aceptable que la lista más votada obtenga directamente la alcaldía", añadió."Además, si admitimos que gobierne directamente la lista más votada se está discriminando a los grupos minoritarios y reforzando el presidencialismo", indicó el dirigente democristiano. Los dirigentes nacionalistas consideran que la reforma de la ley electoral municipal de 1985 ya aumentó el poder de los alcaldes, "marginando por completo a la oposición de la gestión municipal".

El pronunciamiento político de CiU coincide con sus expectativas electorales, ya que las posibilidades de obtener alcaldías en poblaciones importantes en las próximas elecciones municipales y arrebatárselas a los socialistas pasa necesariamente por un acuerdo de las fuerzas de centroderecha. Tras las últimas municipales, CiU consiguió mantener durante un año y medio la alcaldía de Lérida, tras un pacto con el Partido Popular.

Pese a que CiU está centrando todos sus ataques en los socialistas, el secretario general de Convergència Democrática, Miquel Roca, se ha ofrecido en dos ocasiones a participar tras las elecciones en tareas de gobierno con el PSOE si este partido pierde la mayoría absoluta. Ayer en París, tras una entrevista con el ex presidente de la República Valery Giscard d'Estaing, reiteró que "un pacto con los socialistas es difícil pero no descartable". "Es difícil que llegue a ser presidente del Gobierno, pero por propia cortesía conmigo mismo creo que no tengo menos posibilidades que Anguita o que Suárez".