Polémica en Dinamarca sobre el registro religioso de parejas homosexuales
Los obispos de la iglesia oficial luterana de Dinamarca debaten la posibilidad de bendecir a las parejas del mismo sexo que decidan registrarse oficialmente. Mañana domingo entra en vigor la ley aprobada el pasado mayo por el Parlamento danés, que permite a las parejas de homosexuales y lesbianas legalizar su situación.El obispo luterano de Copenhague, Ole Bertelsen, dice al respecto que la iglesia protestante, "debe considerar la forma" de otorgar la bendición divina a dos personas que "se prometen amor y fidelidad". Bertelsen no cree, sin embargo, que deba bendecirse una pareja homosexual, como a los matrimonios tradicionales, pero la iglesia debe iniciar un debate sobre su postura respecto a las nuevas parejas legales, añade.
El obispo de Aalborg, Henrik Christiansen, y su colega de Lolland-Falster, Thorkild Graesholt, no comparten esta opinión. Ningún obispo, "puede dar permiso para bendecir" a dos personas del mismo sexo, porque la iglesia sólo acepta el matrimonio, entre hombre y mujer.
El obispo católico de la capital danesa, Hans Martensen, criticó en una carta al Parlamento la aprobación de la ley de registro de homosexuales, que irá en contra de los niños. La diferencia de sexos es demasiado fuerte para poder anularla de un plumazo, dice Martensen, y se pregunta sobre la ética de un sistema que inculca a la población un juicio de calidad sobre las dos formas de sexualidad humana.
Dos párrocos luteranos de Copenhague publican en el último número del órgano parroquial Praesteforenigens Blad una propuesta de ceremonia de bendición para homosexuales, en una relación frágil y necesitada de la ayuda de Dios. Los dos párrocos, Claus Olderiburg y Thorkild Grosboell, reconocen que se trata de un contrato jurídico, pero confían en que las nuevas parejas gay acudan a la iglesia y quieran estar preparados para recibirles.
Axel y Eigil Axgil, ahora en la cincuentena y pioneros en la lucha por los derechos gay, anunciaron su unión como la primera pareja homosexual del mundo, en lo que la presidenta de la Federación de Homos y Lesbianas, Else Siange, considera un triunfo histórico.
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